Fatiga y Felicidad

A veces nos sentimos tan cansados que nuestras mentes se confunden un poco. Podemos pensar que algo anda mal, podemos empezar a creerlo, cuando es solo una cuestión de energía. ¿Podemos estar felices y cansados? ¿Hasta qué punto podemos mantener estos dos sentimientos en nuestra mente?

A veces, la alegría puede hacernos perder el enfoque. Porque no somos solo un robot. Necesitamos dormir, necesitamos algo de comida y algunos de nuestros estados corporales varían de un día a otro. Aú cuando se sienta genial la conexión entre nuestras mentes y cuerpos, hay una razón para que podamos separar nuestra realidad psíquica de nuestra experiencia corporal.

Imagen por Annie Sprat

A veces puede parecer difícil de distinguir, y terminamos permitiendo que algunos de estos estados físicos abrumen nuestras mentes. Terminamos preguntándonos «¿por qué me siento así?», Especialmente si de alguna manera hemos permitido que esa delgada línea entre el agotamiento mental y la fatiga se difumine durante demasiado tiempo.

A veces la explicación es tan simple que nos la perdemos. ¿Almorzamos? ¿Descansamos un poco? ¿Tengo frío o calor? Así que la próxima vez, antes de considerar algún dilema existencial, trata de recordar ese sentimiento que tienes después de participar en un deporte divertido y desafiante en el cual diste todo. Ahora, pregúntate, ¿mi cuerpo necesita un descanso para disfrutar el momento? A veces, este pequeño ejercicio puede decidir su mente entra en la rumiación depresiva, o en un virtuoso ciclo creativo de desarrollo, autocuidado y optimismo.

Fuente: keephopeful.blogspot.com