Mi sueño siempre ha sido viajar por el mundo, recorrer cada rincón deseado, cómo nadie más deambular por los campos y caminar en una aventura por el bosque, una fuente de inspiración es una amiga, que en realidad me ha apoyado mucho a lo largo de mi estadía laboral.
Pero sé que todo lo que quiero me lo tengo que proponer yo, no solamente es “quiero” porque también lo debo hacer, lo debo lograr, y para ello tengo que ponerme un propósito en la vida, ¿Y cuál es mi propósito? Mi propósito es seguir adelante sin importar qué, sin mirar atrás y caminar siempre al frente con la cabeza en alto.
No ha sido fácil llegar a donde estoy, en toda mi vida hubieron tropiezos, hubieron muchos errores, hubieron fallas, pero sin embargo, aquí sigo de pie, mostrando de qué estoy hecho, mostrando de lo que soy capaz y puedo llegar a ser.
Fue cómo un escrito que hice meses atrás, una frase la cual creo que es la que más me llamó la atención, y por lo tanto lo sigue haciendo. >El diablo susurró a mí oído, tienes que hacerlo, tienes que hacerlo, una y otra vez.
Te recuerdo que hay muchas personas que quieren el bien para ti, pero hay otras que se molestan al ver que estás alcanzando grandes metas, y comienzan a hablar a tus espaldas, haciendo del proceso todo más lento, porque no te quieren ver bien, porque quieren que te vaya al igual que ellos.
Le he dado la espalda a ciertas personas, y en especial a una, porque comencé a notar que me odiaba en secreto, mientras que yo quería lo mejor para ella, mientras le daba todo, mientras que le entregué toda mi confianza, solamente me despreciaba, y ese tipo de personas, son las que me repugnan.