A veces dejamos pasar momentos importantes... No nos fijamos en los pequeños detalles, esos que hacen la diferencia y de los cuales está compuesto este maravilloso pero vertiginoso viaje al que llamamos vida.

Hoy decidimos compartir en familia, celebrar los 65 años de casados de los abuelitos de mi esposa y agradecer que estamos vivos!!! Qué aún a pesar de los problemas y la situación compleja que vive nuestro país, aún podemos compartir y disfrutar.

Fuimos recibidos en casa de la tía Lilita, la cual ambientó el lugar con un buen gusto innegable y con mucho amor, evidenciado en el cuidado tenido con cada detalle de la decoración.

La noche está fresca y propicia para brindar a la luz de las estrellas, haciendo un alto en el sube y baja del día a día y su ya cotidiano estrés. Por mi parte aprovecho de compartir con mi amada y dar gracias a Dios y a la vida por todas las bendiciones que hemos recibido. A todos ustedes amigos que leen estás líneas también quiero desearles las mayores de las bendiciones!!! Saludos a todos!!!