Buenas Tardes, la historia de Milagros me conmovió, ya que a mi padre le ocurrió algo muy similar. El, un inmigrante italiano, que sobrevivió a la segunda guerra mundial y que llego a trabajar incansablemente a estas tierras Venezolanas; no tenia día libre, regresaba a casa al terminar las obras de construcción, trabajó muy duro, y así logro tener una buena posición social. Las continuas fiestas y reuniones de tipo social, trajeron como consecuencia el alejamiento emocional de la familia, y se vio involucrado en relaciones efímeras de una noche o de pocos días. Todo esto, lo llevó a realizar gastos desmesurados que lo obligaron a utilizar los ahorros destinados a la estabilidad económica de la familia. Un día, como de costumbre, introdujo las facturas correspondientes al trabajo realizado en las obras de construcción, y el gobierno, de ese entonces, le informo que ellos no pagarían dichas obras; esto trajo como consecuencia, el embargo de todos sus bienes, quedando todos nosotros, su familia, en la calle. Después de lo ocurrido, el núcleo familiar se desintegro. Nosotros, sus hijos, eramos pequeños y trabajamos para sobrevivir. El tomó la decisión de partir y no supimos nunca mas de su paradero. Muchos años después, nos enteramos donde se encontraba y de su penosa enfermedad. El cáncer, se había apoderado de su cuerpo viejo y cansado; en su lecho de muerte, pidió una última reunión familiar; fue allí donde todos nos perdonamos, y en un suspiro de alivio, exhalo su último aliento partiendo de este mundo en paz. Presencié su preparación, y ayude a introducirlo en el féretro, en ese momento le dije adiós a mi padre!!!!