¿De qué se trata la vida?

El día a día transcurre de una forma tan fácil y veloz a la vez, que cuando realmente nos percatamos del tiempo transcurrido nos cuesta creer que ya han pasado 3 meses, de este año 2018. Y la pregunta que debemos realizarnos en el ahora es: ¿Soy feliz con la versión de quien soy en el ahora?

Es una pregunta dificil, pues muchas veces no conocemos siquiera el verdadero significado de lo que es la felicidad. La verdad es que desde que cambiamos esa hermosa etapa de la niñez y nos adentramos en lo que es ser un adulto, muchas veces nos distancian de esa felicidad que muchas veces sin darnos cuenta, ya habíamos experimentado.

Y es que cuando hablamos de felicidad, sin duda es mas facil definirlo si vemos la actitud de los niños ante las diversas situaciones; tan desentendidos de las consecuencias pero a su vez con esas ansias de saber mas y más. La felicidad la vemos en esa madre que se reencuentra con su hijo luego de tantos meses de separación, donde no importa el tiempo separados sino el tiempo proximo para estar juntos. La felicidad la vemos en nuestras mascotas al llegar a nuestro hogar. La felicidad está aquí, allá y en todas partes, siempre y cuando estemos dispuestos a recibirla.

Así que empecemos, desde ahora, en primer lugar a agradecer cada cosa que tenemos, tanto nuestras fortalezas como nuestros defectos. Las cosas buenas y las no tan buenas. Lo positivo y lo negativo, pues de ambas aprendemos a ser mejor persona.

Aprendamos a disfrutar de cada cosa que sucede en nuestra vida. A ver la lluvia y disfrutar de ella y si nos toca caminar bajo la lluvia ¿Que más da? De seguro nadie ha sufrido al sentir las gotas correr por su cuerpo. Dejemos que la lluvia se lleve lo malo y nos deje solo lo bueno.

Si sale el sol mas radiante de la vida, no suframos por el calor que genera, mas bien recibamos cada rayo de sol, para iluminar el camino por el que transitamos.

Disfruta de tu familia, cada día y de tus amigos que hacen que toda pena sea tolerable, llevadera y superable.

Y por encima de todo, cree, cree en Dios o cualquier ser supremo, o en la vida, o en el destino, o en ti mismo. Pero cree, pues la fé te permitirá llegar cuan lejos así lo anheles y sin duda mientras tengamos vida, debemos seguir y ser la mejor versión de ti mismo.