Navidad y El Niño Dios

LA MANERA DE MIRAR LAS NAVIDADES QUE ENTRE LOS NIÑOS HAY

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Estimados amigos steemians, Cervantiles, Hispanohablante y thealliance, quiero llevar hasta sus ojos y a través de ellos penetrar en sus sentidos y ojala este mensaje pueda llegar donde me gustaría que llegara, es decir, en el sentimiento puro y sano, en ti como humano.

Sabes, mirando a unos niños esta mañana en el mercado que pedían una ayuda, ¡no habían desayunado! con lo injusto que es la vida, o lo disparejo de los atajos, de un atajo me he recordado y de eso voy a escribir
Dos casos dos ejemplos por decir.

Siempre fui un niño precoz en las cosas de la casa, el haberse separado mis padres teniendo muy corta edad, mi madre me trataba como a un mayor de edad. De ella aprendí mucho, entre esas cosas aprendí a observar cuanto asunto raro había en el diario trajinar y en particular en el mes de diciembre por los varios movimientos, bolsas grandes que ocultaban su contenido y dos o tres cajas igual, me intrigaba y preguntaba a mi madre,

• " Mamá que son esas cosas que en tu escaparate guardas?"
• ¡Omar, no preguntes cosas que no puedo responderte, esas cosas ni yo sé que contienen, son de doña Tere!"

Así llego el 24, la gran noche familiar y después de acostarnos, al niño Dios esperar, con la ilusión de todo niño sus regalos tener al despertar.

Conociendo a mi madre y su carácter en particular, no volví del asunto tratar, pero en mi entender cometió un error garrafal al juzgar a mi intelecto por debajo de lo normal y dejo uno de los objetos en su caja original..un inmenso oso de peluche para mi hermana Zulay, élla en su encargo al niño Dios había pedido un muñeco similar.

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Enseguida al ver eso mi mente comenzó a cavilar, pero lo juro por respeto y por temor al que pasar, nada dije a mi madre y tampoco a mis hermanas comentar.

Pero al pasar el tiempo, un año para precisar, Salí de asomado a hablar y en secreto le dije a mi madre.

• "Mamá, por qué me preguntas al Niño Dios qué voy a solicitar, ya yo sé que no existe eres tú que sales a comprar"

Mi madre entre confundida y asombrada , descubierta en su mentira, no hallaba que excusa dar, ya después de varios intentos desistió de continuar y muy tajante me dijo:

• “bueno hijo te acabas embromar” pero te pido, a tus hermanas de esto no le vayas a contar, pero ya sabes que el Niño Dios a tu cama poca cosa va a traer.

Y así fue como la ayudaba a las tiendas recorrer para comprar los regalos que el Niño Dios iba a traer y el 24 en la noche la ayudaba a colocar al lado de cada cama los regalos de Pina y Zulay.

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Que Diciembre tan Mal

Había transcurrido el año más o menos normal pero..siempre hay un pero y hasta dos

Tenía un contrato de construcción de un Liceo en la Colonia Tovar, era de socios acomodados económicamente hablando, entre ellos el dueño de un hotel, muy famoso que por respeto no voy a citar, resulta que tuvieron problemas con un socio en particular, en pleno diciembre y no se pudo cobrar.

Recuerdo mi impotencia para a mi esposa explicar que no teníamos dinero para los regalos comprar y como hacer con los niños y su niño Jesús entregar.

Al salir de la reunión con los socios del liceo, le dije

• "Yasmin, mi amor, maneja tu que yo no puedo"
  Siendo mujer de batallar, sin chistar agarro el volante, pero al cabo de un instante me dijo directamente

• "Mi amor, que a pasado te veo demacrado y preocupado?"

• "Mi vida, para pagar la valuación, no tiene real esta gente y en el banco tengo solo para pagar los aguinaldos de nuestro personal, y sin decirte mentiras me preocupas tu y los niños y sus regalos pendientes".

• "Mi amor, no te des mala vida, tu siempre dices pa’lante, algo debe pasar"!

Y paso, paso que no pude económicamente evolucionar y en un mes que tanto se gasta, es un pecado mortal!
No nos quedo otra opción que a mis hijos explicar llenándonos de paciencia y poder justificar, que el Niño Dios no tenia como a su padre dar el dinero para sus regalos comprar.
Desde ese diciembre J.L y Daniel, conocieron del esfuerzo que hacemos para que en este mes tengan estrenos, juegos o como ahora avanzado el tiempo, celular o computadora.
Desde ese momento dije no vuelvo a ocultar a ningún niño de los míos la verdad en particular, y si quieren les digo la verdad por lo cual me siento obligado hacerlo sin herir y perturbar la mente de un inocente que espera esperanzado los regalos navideños.

J.L y DANIEL

El Niño Rico – El Niño Pobre

Es probable que esto suene a escrito viejo, novela o película de Navidad, pero es la triste realidad de los diciembre navideños y mi experiencia de vivencias en barrios pobres donde he prestado mi presencia, actividad o amistad.

Hay dos caras de la vida y a nadie se puede culpar, a los que tienen maneras de las fechas celebrar ya bien sea por trabajos, por estudio o simplemente ricos de cuna para este ejemplo citar y a los pobres que existen y siempre existirán.

A los niños de los barrios con carritos de madera, latón o cartón he visto jugar y celebrar, al igual que a las niñitas sus muñecas de trapo cargar.

No critico en absoluto a nuestra clase social, bueno cuando la había y de clase media oías hablar, pero lo que no consigo justo es que al Niño Dios se le coloque en la palestra del traerte y no traer.

Como un niño pobre pide de regalo al Niño Dios que le traiga una bicicleta y un celular, ¡por Dios!

Pero cuando ese niño pobre acompaña a la madre que de servicio trabaja, se consigue con los niños en bicicletas, carritos de baterías, iPod, computadoras y demás! E inocentemente cuentan ¡estos nos lo trajo el Niño Dios!
Que conste que no soy ningún resentido social, cada quien tiene lo que se labra o trata de labrar, solo manifiesto mi sentir en cuanto a una figura utilizar (ahora son tres con San Nicolás y Los 3 Reyes Magos).

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OIZA @oizaguirres

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Gracias a Yasmin, mi esposa
A mis hijos José Luis y Daniel

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