El fraude de las metas de año nuevo

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Nada mejor para proponernos mejorar, para declarar nuestro amor a la chica linda que vemos a diario, empezar ese proyecto que tenemos desde hace meses o años, incluso esa dieta que nos hará lucir fitness; que terminar un año e iniciar el siguiente.

¿O no es así? Generalmente pensamos que lo haremos, seremos una persona nueva, productivos y eficientes en todo cuando declaremos justo unas horas antes de iniciar el nuevo calendario; en otras palabras, para dejar de procrastinar, pero ¿qué tan reales y eficaces son esas intenciones y acciones que emprendemos para realizar las tareas auto impuestas?

La verdad es que la mayoría de nosotros siempre lo hacemos; nos planteamos metas que nunca llegamos a cumplir y es normal, lamentable pero normal. Entre la procrastinación, distracciones habituales, quehaceres del hogar y un sin fin de posibles contratiempos podemos incluso alargar las fechas de inicio para esos "nuevos proyectos" para el año que inicia (para muestra el presente artículo pensado para los dos primeros días del año).

Sin embargo ¿en qué parte está la mentira de las metas de año nuevo? La respuesta es simple, en que son impuestas por convención social, podría decirse, y no vienen de la fiel y auténtica motivación del individuo por emprender este pequeño paso que lo acerca a su objetivo de dominar o completar aquello que se planteó; un objetivo que puede ser muy pequeño pero significativo. Esto es, solamente cuando existe la llama interna de la convicción, la fé, la constancia y la decisión por moverse, trabajar, avanzar y lograr completar nuestros deseos; de no ser así estas intenciones no pasarán de un carbón que serán solo olvido en un par de días o semanas, siendo optimistas.

Claro que podemos tener problemas (todos los tenemos en mayor o menor medida), sin embargo no podemos frenarnos permanentemente por pequeños contratiempos en el camino, hay que rodearlos y continuar; incluso en algunos casos, estos problemas pueden ser usados como trampolín para tomar un gran impulso en la dirección que decidamos, así que debemos estar atentos de si en realidad es una ayuda disfrazada de problema.

Como sabemos, son un conjunto de factores los que nos permiten (o nos impiden) ser eficientes en el manejo de nuestros recursos para completar nuestras metas, no de año nuevo sino de la vida; es por ello que digo que las metas de año nuevo son un fraude impuestas tanto por el colectivo como por nosotros mismos; y no, no hay que ser el angel de la desesperanza para verlo sino recordar que el mejor momento para emprender o para iniciar cualquier tarea es hoy y no esperar que falten 5 minutos antes de terminar el año en el que hemos estado posponiendo como si recibieramos dinero por posponer (quisieramos ¿no?). Así que **¡Hey! levántate y anda, no esperes el tiempo perfecto

Así mis amigos les dejo esta pequeña reflexión para recordarnos que siempre debemos mantenernos mirando y caminando en nuestro desarrollo profesional y personal. Gracias por tu tiempo y espero sea de provecho este pequeño escrito, hasta luego.

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