Perdonar significa disculpar a alguien que nos ha ofendido o no tener en cuenta su falta, el verdadero perdón no es un término barato que solo se usa para hacer que instantáneamente todos se sientan mejor. Eso no es un verdadero perdón.
“PERDONAR ES RENUNCIAR A TU DERECHO A VENGARTE”
Perdonamos a otros cuando dejamos de guardar resentimiento y no insistimos en pedir una compensación por el daño que nos hayan hecho o por la pérdida que hayamos podido sufrir. Este es el punto de partida para un perdón genuino. Si no te sientes perdonado, no querrás perdonar a nadie. Si eres duro contigo mismo, serás duro con los demás. Pero entre más gracia recibas de Dios, más gracia se imparte con los otros. Entre más perdón sientas de Dios, más estarás dispuesto a demostrar perdón a otros.
Dios nos manda a perdonar ya que el nos perdono cuando su hijo Jesucristo murió en la Cruz por nuestros pecados, perdona a tu prójimo no importa lo que te haya dicho o hecho, PERDONA¡¡ Cuando perdonas te quitas un gran peso, que difícil caminar con peso, molesta, fastidia, cansa no te da libertad, por lo tanto descarga ese peso para que puedas andar en libertad en tu propia paz, renuncia al odio y dale la bienvenida al perdón.
El perdón te alarga tus años de vida, ya que si sacas ese resentimiento de tu corazón tendrás salud espiritual, y si tienes salud espiritual tendrás salud física.
“PERDONA PORQUE FUISTE PERDONADO POR NUESTRO PADRE CELESTIAL”.