Sangrienta jauría ( poema original)

El mundo es algo muerto se veía.
Cuando no sepas volar ni sonreír.
Solo caminar como una producción.
Donde la tierra pobre sea tu lecho.
Y en el pecho en vez de corazón.
Tengas una sangrienta jauría.

Así vives; susurrando queriendo gritar.
Gastando la vida en cómo vivir.
Esperando la felicidad con recelo.
Así vives, queriendo sonreír
Pero sin lograr hacerlo.

De las lanzas de tus cosquillas
Aun vuelas colibrís. Lo sé.
Y aunque todavía tus ojos brillan.
Tu no tenías corazón, yo te lo invente.