Fijarse en las plantas está bien, en la naturaleza en general. Caminar es algo bastante interesante, sin duda. Yo suelo mezclar la música que sale por mis auriculares con una sensación incorpórea y me siento un poco fuera del mundo, pero al mismo tiempo apegado a él. Al vivir en una ciudad, los rostros de la gente y los escaparates de las tiendas son lo que más me llaman la atención, aunque centrarse en el modo en el que uno camina, prestando atención al cuerpo, es algo que también me resulta entretenido.

Saludos y felices caminatas,