Love, Death and Robots: Reseña

El 15 de marzo pasado se estrenó en Netflix una suerte de antología de 18 historias de ciencia ficción y fantasía llamada Love, death & robots. Cada capítulo duraba de 5 a 20 minutos y en ellas podemos ver una amplia gama de animaciones 2D y computarizada. 

Me enteré de esta serie a través de YouTube; las escenas que vi y las opiniones de los fans me impulsaron a buscarla para verla. Con franqueza puedo decir que los fans de cualquiera de los géneros mencionados no quedará decepcionados, pues hay para todos los gustos, colores y tamaños. Hay capítulos, como el segundo titulado "Three Robots" y el décimo sexto titulado "Ice Age" en donde te puedes reír a carcajadas, y otros, como el capítulo onceavo titulado "Helping Hand" y el capítulo quinto  titulado "Soul Sucker" en donde te quedarás flipando, como dicen los españoles cuando te desencajas del asombro. 

Por supuesto, hay algunas historias que parecerán un poquito flojas como el capítulo décimo séptimo titulado "Alternate History", en donde veremos las seis formas de morir de Hitler y sus consecuencias.

Lo que amé de esta antología es la exploración creativa a través de la animación, el uso equilibrado de los colores y, en el caso concreto de "Good Hunting" "Witness", "The Secret War", "Beyond the Aquila Rift", "Blood Sucker" y "Suits", sus planteamientos argumentales. Estas animaciones en particular me evocaron a una serie de filmes que vi en su momento durante mi niñez y mi adolescencia como la saga de The Matrix, Underworld y Alien. En estas historias en concreto vemos toda una culminación del terror psicológico, el cyberpunk y de la fascinación del hombre por lo sobrenatural y la posible guerra con otros mundos.

Ahora, si me preguntaran cuál de estas historias es mi favorita, en definitiva diría que son "The Secret War" y "Suits". Sus narrativas me dejaron boquiabierta, especialmente la primera; de hecho, coincido con algunos espectadores en que ambas deberían tener sus propias series. Sería interesante ver a un equipo del Ejército Rojo ruso ocuparse de los entes demoníacos invocados por un tipo ambicioso y a un grupo de granjeros humanos asentados en Saturno combatiendo a los familiares del villano xenomorfo con sus máquinas bélicas para proteger sus granjas de una destrucción inminente.

Espero que los directores y el mismo Netflix se decidan a hacer una segunda temporada. O, por lo menos, que escuchen la petición de dos series potenciales.