Hace tiempo que no existo
solo soy posible si transpiro
desde lo que me hace carne viva,
me congelo me suspendo
y pretendo seguir como si el frió me eleva
pero solo me rebaja mientras acompaño a los centígrados
en su lucha por no ser confundidos por el fuego.
Perdí poros y sudor
gane grasa y vasoconstricción,
el frió me inhabilita
me convierte en neblina muy densa,
de las vísceras a la pasión
hay un pulmón de por medio.
Mi calidez se encuentra detrás de toda esta bruma
que no me deja ser,
en el intento por subir mi temperatura
me hago rasguños
los propios dejan heridas mucho mas dificiles de cerrar,
lo que me hiela las reseca
pero no es suficiente
preciso del oxigeno adecuado
para sanar y volver a arder
desde mi poder hasta mi voluntad
desde mi paciencia hasta mi sinceridad
desde mi sensiblidad hasta lo cerebral
desde mi amor hasta mi inocencia,
allí se encuentra mi fuego
con lo vital de mi transpiración
y lo absurdo del hielo
condensándose solo cuando sea necesario,
mientras yo transpire yo existo.
Victoria Monsalve, Marzo 2018
@vickyx159
Imagen tomada de: https://laartrosis.com/2012/09/27/para-el-dolor-de-la-artrosis-frio-o-calor/