Receta de Pie de Limón | Pochito Repostero

Hola hola, queridos steemianos. Hoy vengo con un post totalmente diferente a los que suelo hacer, ya que se trata de una receta de un postre que me encanta: Pie de Limón. Es super fácil de hacer y no lleva muchos ingredientes. Y bueno, sin más preámbulos, vamos a ello.

Ingredientes

Ingredientes:

• Un paquete completo de galleta María.
• Dos huevos.
• Una taza de sumo de limón.
• Una lata de leche condensada azucarada.
• Dos cucharadas de mantequilla.
• Una taza de azúcar.

Preparación:

Trituramos todas las galletas en un procesador de alimentos o una licuadora, hasta que quede un polvo fino parecido a una harina. Derretimos las dos cucharadas de mantequilla y separamos las yemas de los huevos y las unimoc a la harina de galleta, dejamos las claras aparte para hacer el merengue más adelante. Se mezcla bien la harina de galleta con la mantequilla y las yemas hasta que quede con una textura parecida a la de la arena de playa. En lo personal, yo me guío porque al hacer "bolas" con la mezcla, quedan compactas pero se deshacen fácilmente.

Mezcla de la galleta para el pie

Yo generalmente uso las que comunmente se usan para hacer los pies, pero al momento de preparar la receta no la tenía a mano, así que usé una bandeja rectangular. Realmente no importa la bandeja que se use, ya que lo importante es el sabor final del postre. En fin, seguimos con nuestra receta jaja.

Se vierte la mezcla de la galleta en la bandeja y se compacta bien en el fondo, tratando que quede lo más uniforme posible. Yo en lo personal le dejo los bordes altos, porque me encanta comerme el borde de galleta en el pie. Se lleva al horno previamente recalentado a unos 180º centígrados por unos 10 o 15 minutos.

Galleta del pie en el horno

Mientras la galleta está en el horno, procedemos a hacer la mezcla del relleno del pie. Mucha gente piensa que es un proceso complicado o difícil, y no hay nada más alejado de la realidad. Es sumamente sencillo, facil y rápido. En un envace se vierte la taza de sumo de limón con el contenido de la lata de leche condensada azucarada. Se mezcla hasta que quede una sustancia homogénea, ni tan líquida, ni tan espesa, y que al probarla se note tanto lo ácido del sumo de limón como lo dulce de la leche condensada.

Así debe quedar la textura del relleno

Ya pasados los 10 o 15 minutos desde que metimos la galleta al horno, se saca y se vierte la mezcla del relleno sobre la misma. Se vuelve a meter al horno por unos 10 minutos mientras hacemos el merengue.

Mezcla del relleno sobre la galleta

Mientras la galleta y el relleno están en el horno, procedemos a hacer el merengue para decorar el pie. El proceso también es bastante sencillo, aunque a muchas personas no se les da hacerlo.

En envase se vierten las claras de huevo que separamos previamente, se baten a velocidad media-alta con una batidora de mano, aunque si tienen una de base el proceso es mucho más fácil. Una vez las claras estén a punto de nieve, se procede a agregar el azúcar por porciones pqueñas, poco a poco, sin dejar de batir en ningún momento. Sabrán que el merengue está listo cuando se torne de un color blanco brillando y tenga una textura esponjosa.

Preparación del merengue

Una vez hayan transcurrido los 10 minutos y que tengamos el merengue listo, procedemos a sacar la preparación del horno y a decorar el pie. Generalmente uso una manga repostera para decorar, pero no la tuve disponible a la hora de hacer esta preparación, así que opté por simplemente verter el merengue sobre la preparación y, con la ayuda de una cuchara, lo esparcí sobre toda la superficie, haciendo picos con el reverso de la cuchara. También esparcí un poco de ralladura de limón sobre el merengue, para agregar color y sabor al postre.

Pie ya decorado

Una vez decorado, se vuelve a llevar la preparación al horno, esta vez hasta que el merengue se dore y quede crujiente. No digo tiempo en esta parte porque realmente varía según el horno que se use. A mí en este caso se me pasó un poco el tiempo y se me doró un poco más de la cuenta, pero no afectó en nada al sabor del postre.

Pie ya terminado

Y ya está. Su pie de limón está listo para ser devorado jajaja. Este es realmente un de mis postres favoritos, ya que mezcla los sabores que más me gustan, que son lo ácido y lo dulce, y el equilibrio entre ambos es simplemente maravilloso. Me encanta.

Acá les dejo una porción, espero que la disfruten.

Pronto les traigo la receta de una variación de este postre hecho con parchita (maracuyá) que también es divino. Sin más que agregar, Pochito Repostero se despide hasta la próxima. Nos leemos en el futuro.