Las preguntas son eternas o al menos eso parece. En este preciso momento alguien más está contemplando el inexistente silencio que en ocasiones anhelo, pero se encuentra invadido por el constante bullicio de una sociedad donde la decadencia y la ignorancia se volvieron la regla.

Me gusta pensar que alguien más está haciendo lo mismo, o tan siquiera algo remotamente similar como para poder establecer nexos... Bonita forma de no decir nada y decirlo todo. Mi vida es efímera, un día se extinguirá y nada quedará de mi, tan solo las preguntas que en algún momento me realicé bajo un estado cada vez más recurrente en mi, ¿Cual es ese estado? Lo cierto es que ni yo mismo lo sé...

Miento si dijese que no tengo miedo alguno ante ello, pero la bella dama como a todos los demás me visitará, para con un beso desprender mi último aliento.

Pero sé que ese beso me hará beber del dulce elixir del tiempo, poder rememorar toques, fragancias, sabores... y un sin fin de sensaciones. Aquellas miradas en la calle, aquel olor que durante una breve fraccion de tiempo me acompañó, todo lo que para mi ahora tiene valor en ese momento dejará de tenerlo. ¿Qué sería de la vida si careciera de final?

Yo me marcharé, pero lo que me pregunto transcenderá a alguien más, en algún lugar uno más se hará las mismas preguntas que yo en algún momento me hice con respuestas distintas, y volveremos a empezar.