Creer es crear en Cervantes

La facultad del ser humano para comprender aquello que lee, sean los párrafos de un texto, el lenguaje corporal entre otros seres, o la composición de un afiche de alguna película de cine, sin duda alguna, es una de esas tantas maravillas que la vida nos entrega y que es un placer desarrollar. Quizá a veces damos todo esto por sentado; poco nos detenemos a observar y comprender el impacto que generan nuestras palabras y acciones en todo lo que existe dentro y fuera de nosotros.

¿Y cómo hacerlo? ¡Si los estímulos vienen tan pero tan rápido!

Minuto a minuto, con cada decisión que nosotros llevamos a cabo, estamos creando la realidad de nuestra vida y la de nuestra comunidad . Con tan sólo un sí o un no somos capaces de modificar nuestro mundo interno y también el de nuestro cercano entorno; nuestras decisiones y opiniones influyen en la manera en que amigos y familiares perciben el mundo entero y , somos capaces de modificar la vida de personas que físicamente se encuentran muy lejos de cada uno de nosotros.

Creamos nuestra realidad con opiniones y decisiones.

Con la introducción de la Blockchain a nuestra vida y en especial, del uso de criptomonedas para el pago de productos y servicios, la manera más tradicional con la que veníamos haciendo las cosas comienza a reformularse en una tremenda revolución económica y sociocultural. Se presenta ante nosotros como una opción alterna al sistema centralizado al que hemos estado acostumbrados hasta ahora.
Este sistema descentralizado del que hoy formamos parte, es aún desconocido para nosotros, sin embargo, diariamente lo vamos explorando, estudiando y comprendiendo para poder implementarlo de la manera más provechosa posible , buscando lograr la satisfacción de las necesidades de nuestra comunidad. !Vaya, que es importante que comprendamos lo que sucede en nosotros y en los demás para poder crear!

Cree en Blockchain y crea en Cervantes

Cada uno de nosotros lleva dentro una capacidad innata de poder crear y modificar la realidad que respiramos cada segundo, lo interesante es que ahora pareciese que estamos rozando la posibilidad de crear una comunidad mundial en torno a un sistema más inclusivo, que nos invita a crear nuestro propio contenido, sin censura, descentralizado, con oportunidad de ser visto por gran cantidad de creativos en casi todas partes del mundo y lo más impactante es que obtenemos recompensas en criptomoneda por expresar las realidades supremas que logramos intuir. ¿Cuán asombroso es eso? Nunca antes habíamos podido percibir recursos de esta manera.

Eres tú, con tus palabras, tus acciones y la comprensión de todo tu ser quien día a día creas nuestra realidad: la de nuestra Comunidad Proyecto Cervantes.
Qué importante es comenzar a comprender que somos partícipes y creadores de un movimiento que libera mentes, enriquece corazones, aviva el alma y nos da oportunidad de darle rienda suelta a nuestra imaginación. Somos nosotros los dueños y señores de nuestro propio destino y los encargados de nutrir el terreno de nuestra mente con semillas de cultura, esperanza y pura creación.
Cada uno de nosotros lleva dentro una capacidad innata de poder crear y modificar la realidad que respiramos cada segundo, lo interesante es que ahora pareciese que estamos rozando la posibilidad de crear una comunidad mundial en torno a un sistema más inclusivo, que nos invita a crear nuestro propio contenido, sin censura, descentralizado, con oportunidad de ser visto por gran cantidad de creativos en casi todas partes del mundo y lo más impactante es que obtenemos recompensas en criptomoneda por expresar las realidades supremas que logramos intuir. ¿Cuán asombroso es eso? Nunca antes habíamos podido percibir recursos de esta manera.

Así que ahora que crear contenido se vuelve una opción para percibir ingresos y pagar algunas cuentas, se nos pasa el día en esto de pensar, hacer, pensar, hacer, pensar, hacer. Varias veces al día nos encontramos cavilando: ¿cómo hacer esto?, ¿qué voy a presentar mañana?, ¿cómo expresar esta idea?; en esas vamos mientras damos vueltas en la cocina, preparando un sándwich, un taco, una arepa o un café.

Pasa que en nuestra vida cotidiana, nosotros, como creadores que somos, debemos encontrar la manera de vivir todos los hechos que acontecen dentro y fuera de nosotros de un modo continuamente nuevo; siempre con astucia, que sea intenso y que aquella idea que navega en los mares de nuestra mente, sea vibrada con todo nuestro cuerpo, desde nuestro estómago y corazón; que lo que hagamos lleve por dentro un sentido y un propósito que, mayormente, tenga un beneficio para nuestra comunidad.

En un principio crear algo, cualquier cosa, tiene que ver con el hecho de poder concebir nuevas soluciones ante los problemas de siempre. Intuir realidades superiores a las terrenales, esas que a la Naturaleza se le da tan bien demostrarnos continuamente y de manera tan majestuosa, y ser capaces de expresarlas ante la comunidad, bien sea por medio de la ciencia, la filosofía, el arte o el diseño, vienen a ser dos formas bien distintas de una misma cualidad: la creatividad.

La capacidad creadora, hemos de verla como una manifestación en toda acción que el ser humano realice en la plenitud de todo su ser. No hemos de verla como una facultad exclusiva e inherente a los famosos y grandes científicos o artistas, está en nosotros evolucionar ese paradigma, mostrándonos a nosotros mismos que la creatividad habita en el ser de cada uno de los integrantes de esta comunidad.

Esta declaración no resta méritos a aquellas personas que dedican su energía vital y su tiempo al cuidadoso estudio y práctica de su creatividad, de hecho, son contemplados con gran admiración. Diseñadores, artistas, músicos, cocineros, programadores, escritores y demás son apreciados en nuestro proyecto y, porque sabemos la importancia que tienen, es que estamos trabajando para ofrecerles una mayor calidad en nuestra atención.

De todo lo que hasta ahora hemos venido reflexionando, concluyo que debemos darnos la oportunidad de liberarnos de obsoletos pensamientos que nos detenían al momento de crear. Seamos receptivos a la idea de un nuevo aprendizaje, de una nueva manera de hacer vida en conjunto; reflexionemos sobre la dinámica de trabajo en equipo y abramos nuestra mente a un concepto que hasta hoy, parecía exclusivo de los famosos.

SEAMOS DISEÑADORES DE NUESTRO PROPIO DESTINO.