"Feliz Navidad" ... ¿Y próspero año nuevo?

TENGO FE, MUCHA FE, QUE ESTE TIEMPO DE OSCURANTISMO LO VAMOS A SUPERAR. Amén

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REMEMORANDO...

En un pasado no muy lejano, cuando llegaba esta fecha mi esposa y yo acostumbrábamos a salir a pasear con nuestros TRES (3) hijos, los llevábamos a comer, íbamos al cine, entrábamos con ellos a algunas salas de juego; luego merendábamos, comíamos helados y después les comprábamos a cada uno sus estrenos para vestirlos en navidad y año nuevo (ESTRENOS, ROPA NUEVA); entiéndase desde las medias y ropa interior hasta zapatos, camisas, correas y pantalones... TODO NUEVO.

Después, le tocaba el turno a nuestra casa, comprábamos pintura para nuestras paredes y adornos para nuestro arbolito, aprovechábamos para hacer algún arreglo y comprar algunas cosas que necesitábamos, decorábamos a nuestro gusto; también comprábamos los ingredientes para las hallacas y algunas bebidas para ofrecer a los amigos que nos visitaban, gracias a Dios siempre a mis hijos los visitó el niño Jesús... en fin (ÉRAMOS UNA FAMILIA NORMAL COMO CUALQUIER FAMILIA VENEZOLANA)…

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Hoy, ¿TENEMOS PATRIA?... Hoy, en la ¿VENEZUELA POTENCIA?, ¿LA SOBERANA?, la ¿“PATRIA BONITA”?, la que tiene un viceministerio de la “SUPREMA FELICIDAD”, sólo pudimos comprar algo para medio comer. Verdaderamente estamos librando una batalla quijotesca para sobrevivir en medio de una economía MEGAHIPERINFLACIONARIA.

Recuerdo que la felicidad y la alegría nos visitaba con frecuencia pero más en esa fecha. Organizábamos y participábamos en el famoso juego del amigo secreto, tanto en las instituciones donde laborábamos como entre vecinos y familiares. La unidad familiar se hacía presente en la elaboración de las Hallacas y platos navideños. Todo era un feliz acontecimiento de fraternidad y amor, no existía mayor preocupación más allá de algún contratiempo inesperado.

Los intercambios de Hallacas, dulcería criolla, bebidas y regalos... visitar a familiares y amigos, tomar y brindar fraternalmente con el trago de nuestra preferencia, el degustar platos navideños, las misas de aguinaldo, las patinatas colectivas, gaitas, villancicos, parrandas y aguinaldos, disfrutar a los niños exhibiendo su ropa nueva, abriendo sus regalos, jugando con lo que el niño Jesús les había traído, alegrarnos con los fuegos artificiales dándole la; muchas veces nostálgica, despedida al año viejo y recibiendo con alegría al nuevo año era una hermosa costumbre de la otrora Venezuela. Ciertamente todavía podemos disfrutarlo pero la verdad verdadera no como antes.

¡Así son las cosas! Como diría el recordado Oscar Yánez.

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TENGO FE, MUCHA FE, QUE ESTE TIEMPO DE OSCURANTISMO LO VAMOS A SUPERAR EN EL NOMBRE DE NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO QUE NOS LIBERARÁ DE ESTA TRAGEDIA. AMÉN

Autor:@marcosmilano71

Los invito a visitar mi blog titulado: De los Principios y Valores que quedaron atrás.