Hola a todos, hoy he hecho dos post en un día, algo inusual realmente en mi, pero pertenezco a la comunidad de @thealliance como un estudiante y como todo estudiante debe hacer su tarea (Que olvide hacer), esta semana la tarea es sobre "Coffe time" espero ustedes lo disfruten.
Recién despierto, con un pie afuera de la cama y el otro adentro, suspiro aletargado, me levanto del colchón con pereza, ni me detengo a hacer el típico viaje al baño, para verte las lagañas o lo desordenado que tienes el cabello, voy directo a la cocina, saco una desgastada cafetera, le echo unas cuantas cucharadas de aquel polvo oscuro con olor fuerte, vierto agua, enciendo la estufa y me dispongo a preparar la mesa con los implementos necesarios para ese tiempo que para mi es sagrado, que sólo consta de una taza y nada más.
Espero ansioso a que suene la cafetera, suena y de un sólo movimiento, vierto el café en la taza. La cocina y toda la casa se perfuma de su aroma, comienzo a beber de aquel delicioso brebaje, me siento solo en la mesa con la taza en las manos, me bebo el primer sorbo, siento como aquel amargo sabor se esparce por todas mis papilas gustativas, como si mi nariz al entrar en compacto con el humo impregnado con el café se dilatarán y respirará diez veces mejor, deja ese sentimiento de sabor a seco en la boca.
Hay días donde se me ocurre echarle un poco de vainilla liquida, a veces un poco de canela para acelerar un tanto el pulso, una o dos cucharadas para matizar lo amargo, pero hoy no, quiero disfrutar de su sabor sin alteraciones. Puedo considerarme un amante del café, no me importa mucho si esta frío, caliente o a temperatura regular, de cualquier forma lo puedo disfrutar.
Estando frío es amargo y parecería un golpe contundente a la boca. Caliente es amable y te invita a tomar un poco más. Y estando ni muy frío o caliente, te da la invitación a tomártelo sin prisas y disfrutando sorbo a sorbo aquella experiencia gustativa.
Puedo tomarlo tanto de día como de noche, no me altera el sueño como a muchos les puedes suceder, lo tomo por puro y sencillo placer. Cualquier cosa es una excusa para mi beberlo, desde una invitación amistosa acompañada de esa bebida oscura o un funeral donde parece que las penas se diluyen con ese sabor implacable. No puedo describir con exactitud que es lo que más me gusta de el.
Sólo puedo decirte honestamente que disfruto de el café como cualquier otro placer, cualquiera que pueda ser.
No puedo saber si hice bien mi tarea, pero hice lo que pude y espero sea de su agrado, de no ser así, pueden decírmelo en los comentarios y yo con gusto los leeré.