En el hilo del  ser, encadenando  la vida es  un momento,  un momento.

Nos parece que aprendemos.
Bien en el vacío.
Bajo el ruido de las tormentas y los gemidos de las personas.
Gritemos orgullosamente: "¡Adelante, Rusia!"
Así que, como si apresurara las flores.

Miento a veces, tratando de dejar caer los pensamientos,
Y no vayas a ningún lado... Por una vez...
No le digas a nadie que el resultado del "creador" es,
No, no te quemaría fuego,
Princesa de la oscuridad.

Es una pena que Nietzsche no estuviera aquí conmigo.
Y los trineos van ganando carrera.
No podremos jugar un empate.
Loco, en definitiva.
Pero si vuelves con testigos leyendo esto.

No tengo miedo de nada en la tierra
En un castillo fantasmal, el maestro es una mala roca...
Estamos lejos de ellos para siempre.
Le gritó: ¡Cáncer, devuélvete las polainas!
Que veo tus ojos en un sueño, yo.

Y de alguna manera extraña sonrisa
Una ventisca en ríos sombríos,
En el corazón por siempre aman la ira,
Y la eternidad, como un chal, es arrojada sobre ellos.
Y lo sacrificarán.