Sin Destino

Aun recuerdo aquel día cuando le vi, habría jurado que exhalaba emoción y no era para menos el día anterior me dijo cuáles eran sus ideas

-Quiero despejar mi mente, la rutina me agobia y necesito ver nuevos lugares, conocer nuevas personas y vivir, vivir de verdad- Me confeso

• Es una locura- le respondí

Asintió con la cabeza y empezó a reír con fuerza. Ahora estaba justo ahí frente a mí con fuego en su mirada, me abrazo y dijo:

-Nos veremos pronto-

Luego de eso camino firme en dirección hacia su auto en donde ya se encontraban algunas maletas con varias de sus pertenencias, abrió la puerta de este y coloco una de nuestras canciones favoritas en la radio antes de perderse en el horizonte junto al atardece

Luego de eso seguí mi vida, con menos alegría. A veces me hacía falta escuchar sus incoherencias, sus propuestas e ideas hasta que me llego una carta al trabajo, pero no era una carta común y corriente era una postal de una reserva natural muy conocida pero muy lejana que decía:

-La verdad no ha sido fácil pero mira de donde te envió esta carta y antes de este lugar estuve en otros muy interesantes, a decir verdad no ha sido tan fácil como te lo dije, hay que trabajar en algunas cosas muy incomodas y es complicado en un principio pero créeme lo vale, han pasado 74 días y no me arrepiento quisiera darte mas detalles pero voy rumbo a las montañas. Te volveré a escribir en cuanto pueda.

Me lleno de alegría el leer esas líneas y saber que cumplía su sueño fue aun más gratificante, no sabría cuando nos volveríamos a ver pero yo también debía seguir con mi vida y eso hice:
Me ascendieron, aumento mi sueldo, compre mejor ropa y mejore mi salud así como también mi estado económico
La verdad es que no podía quejarme me iba muy bien hasta que recibí esa segunda carta desde las lejanas costas donde las playas pasan a ser un mar lleno de olas violentas en donde me dijo que buceo y en verdad no podía creerlo pero su mensaje no era tan positivo como el primero

-han pasado 151 días y la eh pasado increíble, nunca creerás las cosas que hice y te aseguro estas quedaran conmigo para toda la vida sin embargo hubo complicaciones que te diré en un par de días hasta entonces.

Al cabo de unos 10 días aproximadamente le vi regresar e invite a mi casa donde prepare café y algunos bombones para hablar sobre su viaje. La siguiente hora en la que hablamos estuvo repleta de historias que no habría podido ni soñar

-De verdad se puede hacer tanto en solo una vida? -Pregunte-
-Eso y mucho mas -Respondió-

Al Responderme note como dio un suspiro y por mi mente algo paso, realmente no todo estaba bien

• y... porque regresaste?
• Tuve problemas, las cosas se complicaron y ya no tenía dinero así que vendí mi auto y compre un boleto de vuelta aquí a casa

No hice más preguntas, solo le apoye a regresar, a estabilizarse mientras se acostumbraba nuevamente pero me di de cuenta que nada funcionaba ahora veía el mundo de otra forma y no sabía qué hacer para cambiar su humor

Un jueves fui hasta la puerta de su casa y le llame repetidamente hasta que me recibió en su hogar mirándome de forma muy extraña y bien, yo también lo habría hecho.

• Que ocurre? Pregunto con intriga
• Eh decidido que al igual que tu, yo quiero vivir aventuras así que me iré ahora mismo, no esperare y aprovechare que la semana siguiente es feriada, pero no soy capaz de ir a una primera aventura en solitario y aunque mi auto no es tan grande como lo era el tuyo no tengo las mejores ideas por eso quería saber si... quieres venir?

Sus ojos brillaron y sin pensarlo dos veces dijo que si
-A dónde iremos?
-Nunca me había hecho esa pregunta.
Sabes las montañas escarpadas que subiste en tu viaje ?
-Si
-Bien ya las subiste pero como crees que sería bajarlas?
Ohh espera, sabes que siempre eh querido, lanzarme de un paracaídas
podemos hacer ambas cosas si quieres - añadí-

Al Subir al auto me pregunto:

• Por qué haces esto?
  Le mire a los ojos y respondí:
  -Porque somos dueños de nuestro destino y porque... Solo se vive una vez

Wallace