La noche se cernía sobre la ciudad. Los malvados sabemos que les gusta la noche, y por no decirlo, ¿a quién no le ha gustado la noche?
La noche se presenta como siempre, los vicios que deambulan como zombis por la noche. La razón es estar lo más perdidos posibles, así que en la mayoría de los lugares ocurren siniestros que al final alcanzan el ímpetu y la razón se pierde, así que nada de lo que parece es. Todo se confunde, y las personas de día son otras. Denuncian a cualquiera, dictan moral y buenos tratos. ¿Qué te dijiste y qué te dijeron? Denúncialo. Así, la telaraña de la noche no invade el día, solo a aquellos que ya no tienen retorno del vicio, alcohol o drogas.
Pero la rectitud diaria habla de la metamorfosis de la gente. Todo está en la misma persona, pero no se da cuenta del daño que se hace a sí misma. La mente tolera esto de una manera tan manejable. Así, dos conductas contrarias viven en el mismo ser: el trabajador responsable, el padre genial, el esposo atento, el hijo ejemplar; y la otra escena, el padre infiel, el hijo vicioso y la madre fácil. Todo se puede conjugar en el escenario de la vida.
Divertite a mas no poder que todo pasa menos las enfermedades de trasmicion sexual!!!