Al recién mudarme de ciudad llegue a casa de unos familiares, como si fuese una inquilina daba una mensualidad para ayudar con la comida, pero luego comenzaron los problemas, ellos dejaban todos los platos sucios en cada comida y yo los lavaba, al igual que ayudarles con las tareas escolares, ese no fue el problema, no me incomodó ayudar en la casa ajena en la que estaba, el problema fue que debía vestirme a diario en la cocina porque no podía encender la luz de la habitación para no despertar a mi prima, además de dormir a diario en una colchoneta que a diario sus hijos orinaban y aunque me bañaba sentía mal olor, aunque les dije no hicieron nada al respecto y recordé los años anteriores cuando visitaban mi casa y mamá me colocaba a dormir en el piso o el sofá porque la cama era para la visita, no obstante cuando me fui dijeron que yo no hacia nada solo dormir, entonces entendí que no contaba con familia.
En la universidad la suerte no fue distinta, cuando estaba en 3er semestre mi madre tuvo un accidente que por suerte sobrevivió, yo en ese momento estaba en finales y no pude pasar los exámenes así que repetí el semestre, porque mi cabeza no paraba de estar preocupada por mi madre, pero ese tiempo me ayudó a compartir más con ella, luego aparecieron otros contratiempos pero finalmente logre graduarme, para entrar oficialmente por varios años al desempleo.