No hay peligro, negativo y prohibido. Nos mostraron el comportamiento que no contaba las respuestas a la paciencia de nuestras acciones.
Una de las primeras acusaciones la hizo Caín, quien según las Escrituras fue el responsable del primer asesinato de la historia. Estaba celoso porque el Señor había aceptado los sacrificios de Abel, su hermano menor. Luego la atacó con ira.
Esta actitud es tristemente normal. Actuamos mal, pero, aunque el mal sabe, cambiamos la situación que cambiaba mucho tiempo y lo reconoce. Somos el muchacho travieso que rompe un jarrón en una habitación con un globo y acusa a la mascota a pesar de que todo esté en su contra.
Nos preocupamos por el “dinero” y la seguridad
A veces, erramos por el lado de la precaución, cuando discernimos nuestros motivos, nuestros malos hábitos y nuestros motivos, nos dejamos desprotegidos. Escondemos nuestra naturaleza humana, que a menudo es egoísta, envidiosa y cruel.
Aceptar que somos "malos" requiere una conciencia personal y pública de la necesidad de cambiar el comportamiento, y no siempre estamos preparados para el cambio. Entonces es más conveniente esconderse detrás de las excusas.
Pero nunca me alejé del faro
Todos queremos ver la luz y buscarla. Porque la luz nos da paz y nos permite caminar seguros. La oscuridad, o nuestro deseo de ocultar nuestros pecados y maldad, muestra que estamos lejos de la luz. La luz se coloca en una posición para extender el haz, donde se aplica la luz.
Tú y yo tenemos mucho escondido.
Ese deseo, ¿tienes que pensar en estas personas, que te hieren siendo los más cercanos, tanto que se nota a flor de piel? Me gustaría estar bien y no tener lamentaciones, pero no se puede olvidar que la piel no es perfecta, quedan cicatrices a pesar de la seguridad que le da a quien tiene dentro. Para ti son cicatrices, pero en realidad son fisuras que, curadas y determinadas, permitirán que fluya más luz a través de ti, para que te hagas feliz y mejores tus beneficios en tus relaciones con los demás.
El perdón tiene mala reputación.
Había vivido una vida triste y había acumulado amargura en su corazón. Las piedras que le habían arrojado durante su vida se habían atrincherado en su memoria. Estaban pegados a su espalda y eran pesados. Se las quedó porque eso era lo que podía hacer, pensó que tal vez se cubriría con esa armadura, para que no le doliera más. Pero el peso era tan pesado que le impedía caminar. El sabio dijo que la ira es el veneno que te llevaré. Pero no puede ver la verdad, y está tan inclinada. Encontró su desafortunado. Por eso también utilizó excusas: “Reaccionó con amargura porque me duele el corazón”, “Quiero evitar el contacto adecuado”, “Siempre estoy molesto porque sufro mucho”.
La confusión implica un mal nombre para muchas excusas. Muchas personas se deslizan: perdonar a los enemigos es dar por olvido a la justicia. Pero muchas personas dicen que hicieron un pecado serio.
El perdón es una cura.
Se han hecho muchos estudios que han demostrado que los beneficios físicos del perdón son amplios, reales y comprobados, es ahora de centrarnos en el efecto beneficioso del perdón a nivel espiritual. El perdón, si tienes el coraje de vivirlo, será el mejor regalo que te harás en toda tu vida.
Déjame tus COMENTARIOS y no olviden SUSCRIBIRSE! es completamente GRATIS!!!
También SÍGANME POR MIS REDES SOCIALES (Facebook, Instagram, Telegram, Twitter y Youtube como CAMINO ESPARTANO) y sabrás cuando subo un artículo nuevo, COMPARTE para que más personas disfruten este contenido y juntos LLEGUEMOS A LOS 1000 K!