Los Siete Pecados Capitales (七つの大罪, Nanatsu no Taizai)

Era la más fuerte y cruel orden de caballeros en toda Britannia, formada por 7 caballeros que llevan en sí la marca de una bestia en su cuerpo. Anteriormente fueron conocidos como traidores debido a que se les inculpó de haber matado al Gran Caballero Sagrado, Zaratras.
El grupo fue originalmente una orden de caballeros que servían en el reino de Britannia y estaba liderado por Meliodas. Sin el conocimiento de la mayoría de sus miembros, se formaron los Siete Pecados Capitales con el propósito expreso de derrotar a los Diez Mandamientos. Hace 16 años, el rey de Liones tuvo una premonición a través de su habilidad Vision, en la que ellos se convertirían en los protectores del reino. Al escuchar esto, tanto Meliodas y Merlin se encargaron de encontrar los otros cinco miembros, con el fin de detener a los Diez Mandamientos, si llegaban a ser revividos.

Los Siete Pecados Capitales sirvieron a Britannia durante seis años, ganándose una gran reputación durante este tiempo como los caballeros mas fuertes de Liones. Sin embargo, debido a que fueron inculpados por asesinar a Zaratras, el Gran Caballero Sagrado, se los tachó de bandidos y traidores. Meliodas ordenó al grupo a dispersarse para evitar ser capturados, y todo el mundo fue capaz de escapar por separado. Se sospecha que uno de los miembros podría ser un traidor que ayudó a trazar las artimañas y que dejo inconsciente a Meliodas poco después de dar la orden de escapar. Mas tarde se reveló ser Merlin, aunque al parecer esta tenia un motivo para hacerlo que aun no se ha revelado.

Los Siete Pecados Capitales reaparecieron diez años más tarde en el reino, después de haberse reunificado seis de sus miembros. Ellos ayudaron a la tercera princesa de Liones, Elizabeth, a liberar el reino del gobierno opresivo de los Caballeros Sagrados y detener el plan de Hendrickson para liberar el sello del Clan de los Demonios.Tras la derrota de Hendrickson, los Siete Pecados Capitales fueron alabados como héroes por salvar el reino y fueron absueltos de sus crímenes falsos, dándoles la bienvenida al reino de Liones una vez más.

Después de esto, dos miembros del grupo se separaron del resto, mientras los otros cuatro se vieron envueltos en la batalla contra los Diez Mandamientos. Tras unirse todos una vez más, incluyendo al último miembro faltante, decidieron tomar partido para detener a los Diez Mandamientos.