Una triste realidad para los cristianos de hoy; la persecucion contra una de las creencias mas antiguas y numerosas del planeta, no tienw limites.
Al menos 207 personas murieron y unas 469 resultaron heridas en el Domingo de Resurrección más sangriento en Sri Lanka, después de una serie de explosiones simultáneas en cuatro hoteles, un complejo residencial y tres iglesias, donde numerosos fieles celebraban una de las grandes festividades cristianas.
Las primeras explosiones se registraron hacia las 8:45 de la mañana (hora local) en tres hoteles de lujo y tres iglesias, donde numerosos fieles celebraban el Domingo de Resurrección, según datos confirmados por el portavoz de la Policía de Sri Lanka, Ruwan Gunasekara.
Las iglesias atacadas son una en Colombo (la capital de Sri Lanka), otra en Katana (oeste del país) y la tercera en Batticaloa (este). Por otro lado, los hoteles de lujo donde se registraron las explosiones son el Kingsbury Hotel, el Shangri-La y el Cinnamon Grand Colombo, todos en la capital.