Ilustración propia de la ola de Hokusai
Siempre he tenido una cabeza muy ensoñadora, buscando por todos lados la forma de ver belleza y magia en cada momento.
Pero en los últimos años he intentado aplacar esa parte de mí, diciéndome que no servía de nada, que no era útil.
Y sin darme cuenta, creé a mi alrededor una capa de oscuridad, que me había distanciado de todo lo bonito de la vida.
Quiero volver a sentirme bien con el mundo, disfrutar cada segundo y no tener que calcular cada movimiento para que sea el más óptimo, sino simplemente... Ver y llenarme de alegría por seguir viviendo.