Tanto aqueos como argivos, en latitudes distintas y desde 1800 años a.C, aparecieron por vez primera visibilizados en los relatos de Homero, en su obra la Ilíada, obra de relatos míticos de aquellos pueblos antiguos, con sus hazañas y dioses. Una de las tantas tribus aqueas se hacían llamar **"_helenos_"** y a la región que habitaban la denominaban la **_Hélade_**, cosa que ha perdurado inalterable desde la Época Micénica hasta el día de hoy, lo que nosotros como hispanohablantes llamamos "griegos", son el pueblo que ha llamado a su propia tierra la "Hélade", incluso el nombre oficial de "**Grecia**" es: ***República Helénica***.
Nuestras palabras como hispanoparlantes "Grecia" y "griegos", las hemos heredado de los antiguos romanos. Todo comenzó cuando un grupo de emigrantes helenos arribó a la península itálica, luego de una travesía relativamente corta a través del mediteráneo (la distancia que separa las costas del Peloponeso hasta la zona más meridional de Italia, ronda los 50 kilómetros). Esta tribu que estableció el primer contacto con los antiguos romanos, se hacía llamar a sí misma "graikoi", y cuyo sonido al ser escrito en latín por los romanos, terminó convirtiéndose en "graeci". Por extensión los romanos comenzaron a denominar a todos los helenos como "graeci"", pertenecieran o no a la tribu "graikoi", con el devenir de los siglos esta palabra latina devino en la palabra castellana "griegos".
Los diptongos tanto griego "ai", como latino "ae" se ponuncian como una i larga,la "K" griega y la "C" latina precedida de vocal, se pronunciaba de manera idéntica a como pronunciamos la letra "K" en castellano; por lo que aún con grafías distintas, la pronunciación de "graikoi" y "graeci" era muy similar.