Valverde tiene prisa por Junior Firpo, 22 años, lateral izquierdo que pese a cierta fragilidad defensiva y cierta tendencia a las lesiones, es el jugador que el Txingurri ha señalado para dar oxígeno a Jordi Alba, que terminó la temporada pasada reventando en Liverpool y la final de Copa ante el Sevilla por no tener sustituto en todo el curso, una vez comprobado que Juan Miranda todavía no estaba para la élite. El Barça ya ha admitido su interés por el bético y las diferencias económicas de los clubes, gigantes a principio de verano, ya no parecen tan irreconciliables. Valorado en 25 millones por la web especializada transfermarkt, el Barça no se plantea pagar más de 20 y no quiere desprenderse de Miranda, que viene de jugar un gran Europeo Sub-19 y al que se prefiere ceder.
Aunque el club ya ha deslizado los nombres de Philipp Max, lateral izquierdo de 25 años del Augsburg, y de Ricardo Rodríguez (26 años), Milán, por si la operación Junior fracasase, Valverde espera que esta vez el club no le juegue la mala pasada del verano de 2017, cuando puso encima de la mesa el nombre de Íñigo Martínez para reforzar la defensa y el club se echó atrás finalmente por el respeto de las vacas sagradas a Mascherano. Ese ejemplo se ha repetido en algún caso más aunque esta vez las circunstancias son distintas y el asunto pondrá prueba a Eric Abidal, en su primer gran examen como responsable máximo de la parcela de fútbol tras el adiós de Pep Segura.
Valverde tiene prisa por Junior Firpo, 22 años, lateral izquierdo que pese a cierta fragilidad defensiva y cierta tendencia a las lesiones, es el jugador que el Txingurri ha señalado para dar oxígeno a Jordi Alba, que terminó la temporada pasada reventando en Liverpool y la final de Copa ante el Sevilla por no tener sustituto en todo el curso, una vez comprobado que Juan Miranda todavía no estaba para la élite. El Barça ya ha admitido su interés por el bético y las diferencias económicas de los clubes, gigantes a principio de verano, ya no parecen tan irreconciliables. Valorado en 25 millones por la web especializada transfermarkt, el Barça no se plantea pagar más de 20 y no quiere desprenderse de Miranda, que viene de jugar un gran Europeo Sub-19 y al que se prefiere ceder.
Aunque el club ya ha deslizado los nombres de Philipp Max, lateral izquierdo de 25 años del Augsburg, y de Ricardo Rodríguez (26 años), Milán, por si la operación Junior fracasase, Valverde espera que esta vez el club no le juegue la mala pasada del verano de 2017, cuando puso encima de la mesa el nombre de Íñigo Martínez para reforzar la defensa y el club se echó atrás finalmente por el respeto de las vacas sagradas a Mascherano. Ese ejemplo se ha repetido en algún caso más aunque esta vez las circunstancias son distintas y el asunto pondrá prueba a Eric Abidal, en su primer gran examen como responsable máximo de la parcela de fútbol tras el adiós de Pep Segura.