Cuando se trata de iniciar el escrito de obras con unos cortes propios y recurriendo a la inventiva de la narrativa que antecede temas diversos.
Con la autora como:
PAUL A. BOGHOSSIAN - en "El Miedo al Conocimiento" (Contra el Relativismo y el Constructivismo)
"El Miedo al Conocimiento: Contra el Relativismo y el Constructivismo" de Paul A. Boghossian, no permite explorar a esta como una obra provocativa que aborda críticamente las corrientes contemporáneas de pensamiento que desafían la noción de verdad objetiva y conocimiento sólido. Como Boghossian, es por una parte filósofo y también es profesor, se sumerge en el debate entre el relativismo y el constructivismo, argumentando en contra de estas perspectivas que erosionan la idea de una realidad objetiva compartida. Y que son muy recurrentes en muchos enfoques fuera del campo filosófico particularmente.
El libro comienza desentrañando los fundamentos del relativismo, exponiendo sus implicaciones en la negación de la existencia de verdades universales y objetivas. Para lo cuál Boghossian argumenta que este enfoque debilita la base misma del conocimiento, socavando la posibilidad de establecer criterios objetivos para evaluar afirmaciones y teorías.
Boghossian luego se adentra en el constructivismo, señalando cómo esta perspectiva sostiene que las verdades son construcciones sociales y culturales. A través de un análisis riguroso, el autor destaca las limitaciones del constructivismo al sugerir que socava la distinción entre lo verdadero y lo falso, erosionando la objetividad del conocimiento como manifestación de la realidad.
Por ello mismo, el autor también aborda la influencia de estas corrientes de pensamiento en la educación y la búsqueda de la academia, señalando cómo el relativismo y el constructivismo pueden llevar a una pérdida de rigor intelectual y a la falta de estándares claros en la evaluación del conocimiento. Argumenta que este fenómeno puede tener consecuencias perjudiciales para la sociedad en general.
Daños que estamos pagando en la actualidad pero que son peores conforme avanza la sociedad líquida y que es casi gaseosa.
A lo largo del libro, Boghossian defiende la importancia de reconstruir la confianza en la posibilidad de conocimiento objetivo y la existencia de verdades universales. Propone que la crítica y la reflexión razonada son esenciales para el avance del conocimiento y la sociedad, destacando la necesidad de mantener la distinción entre lo verdadero y lo falso.
Esto nos sirve para continuar en esa discusión de elementos fundantes de la cultura y sociedades modernas actuales.