El daño cerebral adquirido traumático es una lesión en el cerebro causada por una fuerza externa: las causales comunes incluyen caídas, accidentes automovilísticos, agresiones o ser golpeados por objetos en situaciones como por ejemplo la práctica de ciertos deportes.
El daño cerebral adquirido de origen traumático se clasifica según su gravedad: leve, moderada o grave. Desde una perspectiva médica, este juicio se basa en lo que se conoce como Escala de coma de Glasgow, que evalúa las respuestas motoras, verbales y cognitivas de la persona. La escala va de 3 a 15, donde 3 se asigna a alguien que está muerto o en coma y 15 es un estado normal. Alguien con una lesión neurológica leve generalmente tiene una GCS de 13 a 15.
En ausencia de una evaluación clínica, la lesión se considera de moderada a grave si hay una pérdida del conocimiento que dura más de 30 minutos y la amnesia (pérdida de memoria) dura más de 24 horas. Y por otro lado, será leve si no se cumplen esas condiciones.
Daño cerebral adquirido traumático: signos y síntomas
Los síntomas comunes de una lesión cerebral traumática leve son dolores de cabeza, mareos y fatiga, alteraciones del sueño, problemas de memoria o concentración y visión borrosa.
En el caso de una lesión cerebral traumática grave, los síntomas pueden incluir dificultad para hablar, confusión profunda, convulsiones, dolores de cabeza persistentes o pérdida del conocimiento.
Daño cerebral adquirido: ¿qué funciones tiene la terapia ocupacional?
La terapia ocupacional es la única profesión que ayuda a las personas con limitaciones a lo largo de su vida a hacer las cosas que quieren y necesitan hacer mediante el uso terapéutico de las actividades diarias.
Los terapeutas ocupacionales permiten que las personas de todas las edades vivan la vida al máximo, ayudándoles a promover la salud y prevenir lesiones, enfermedades o discapacidades.
Las intervenciones habituales de terapia ocupacional incluyen ayudar a los niños con discapacidades a participar plenamente en situaciones escolares y sociales, ayudar a las personas que se recuperan del daño cerebral adquirido a recuperar habilidades y brindar apoyo a los adultos mayores que experimentan cambios físicos y cognitivos a raíz del avance de la edad.
Los servicios de terapia ocupacional generalmente incluyen:
• Evaluación individualizada, durante la cual el paciente y la familia junto con el terapeuta ocupacional determinan los objetivos de la persona
• Intervención personalizada para mejorar la capacidad de la persona para realizar las actividades diarias y alcanzar las metas específicas propuestas
• Evaluación de resultados para asegurar que las metas se estén cumpliendo y / o hacer cambios en el plan de intervención.
Los profesionales de la terapia ocupacional tienen una perspectiva holística, en la que el enfoque está en adaptar el entorno del paciente o la tarea concreta a realizar para que se adapte a la persona, siendo el paciente una parte integral y activa del equipo de terapia.
Daño cerebral adquirido, mirada desde la terapia ocupacional
El daño cerebral adquirido puede afectar a las personas de diversas maneras y el equipo de terapeutas ocupacionales de DACER está altamente capacitado para trabajar con los clientes en rehabilitación y encontrar diferentes formas compensatorias para ayudarlos a llevar una vida lo más satisfactoria e independiente posible.
¿Cuáles son las dificultades comunes asociadas con el daño cerebral adquirido?
Los efectos de una lesión cerebral pueden ser de gran alcance y las dificultades asociadas pueden ser tanto físicas como cognitivas.
Las dificultades físicas tras el daño cerebral adquirido pueden incluir cambios en el tono muscular, como aumento de la espasticidad, alteraciones y dificultades en el habla y comprensión del lenguaje, movilidad, temblores o movimientos incontrolados, convulsiones, fatiga.
Las dificultades cognitivas pueden incluir pérdida de memoria a corto y largo plazo, incapacidad para organizar y planificar, dificultad para expresar o controlar emociones, cambios de comportamiento y personalidad, o desafíos con la motivación, concentración o resolución de problemas.
Tras el daño cerebral adquirido, los pacientes pueden experimentar un cambio en sus roles laborales, sociales y familiares.
Daño cerebral adquirido: ¿Cómo puede ayudar la terapia ocupacional tras la lesión?
Un terapeuta ocupacional puede trabajar de forma independiente o como parte de un equipo multidisciplinario para evaluar y tratar a un paciente tras una lesión cerebral. Trabajarán con el paciente y su familia para identificar las áreas de dificultad y cómo estas van a impactar en su rutina diaria.
Mediante el establecimiento de metas realistas y alcanzables, el terapeuta ocupacional y el paciente trabajarán juntos a través del plan de rehabilitación para lograr el mayor nivel de independencia y capacidad posible, buscando que la persona recupere la autonomía que ha perdido a raíz del daño cerebral adquirido.
A continuación, algunas formas prácticas en las que un terapeuta ocupacional puede ayudar después de una lesión cerebral:
• Planes de gestión de la fatiga para garantizar que el paciente se adapte a sí mismo para lograr sus objetivos
• Estrategias de memoria
• Planificación de rutina
• Soporte de acceso comunitario, para ayudar al cliente a utilizar supermercados, cines, gimnasio
• Apoyo al regreso al trabajo o voluntariado
• Ayuda para volver a actividades sociales y deportes / pasatiempos.
• Entrenamiento de viaje
• Higiene del sueño
• Estrategias de motivación y planificación
• Manejo de la ira y el comportamiento
• Asesoramiento especializado en equipos como sillas de ruedas, camas, escaleras o elevadores de piso
• Evaluaciones, planes y capacitación de mudanza y manipulación
• Adaptaciones de viviendas y evaluaciones de viviendas
• Descargas facilitadas
• Educación y formación del cuidador y la familia
• Técnicas y actividades relacionadas con la independencia en las actividades diarias, como lavarse y vestirse o preparar comidas.