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Haciendo Arepas

Este día comenzó desde muy temprano para nuestro grupo #abrazonacional preparando las Arepas (alimento tradicional de nuestro país)con su relleno y un jugo de papelón con limón que no es por hablar de más, pero quedo estupendo.

El relleno fue carne molida con aliños y vegetales.

Comenzamos a rellenar las arepas y a preparar todo para trasladarlas y en último momento nos tocó hacer más arepas, pues quedó suficiente relleno para otras y nos quedamos con harina sin preparar.

Ya preparados con nuestras arepas y el jugo de papelón listo decidimos salir a las plazas a ver con quién y que historias nos encontrábamos.

Historias de mi gente

Armando Mendoza, popularmente conocido como "El pibe" es un señor que se dedica a ayudar a los vehículos a estacionarse o como él nos dijo con una sonrisa en la cara " Yo me dedico al arte de parquero".

De 62 años de edad, tiene un problema en la pierna izquierda por un accidente, anteriormente se desempeñó como profesor de matemáticas, pero al tener problemas con el alcohol terminó en las calles, nos comentó que hoy en día se arrepiente de muchos errores cometidos y que ya cuando se llega a esa etapa no hay perdón que funcione, pues ya la vida y el tiempo está perdido.

Daniel Espinoza, oriundo del estado Guárico y de 67 años de edad nos comenta que nunca aprendió a leer ni escribir, pero que fue un chófer de camiones muy habilidoso y se conoce las rutas de Venezuela como la palma de su mano, perdió su trabajo cuando vendieron el trasporte donde trabajaba y los nuevos dueños pidieron a todos los chóferes documentos legales que él no tenía y por lo tanto se quedó sin empleo. Luego trabajó en fincas, podando la grama de algunas casas y dice que sobrevive de "matar tigritos" (un dicho venezolano que significa de: trabajos rápidos e informales) así que nos agradeció mucho la arepa y arrojó a nuestro grupo muchas bendiciones.

El Sr. Anselmo, nos comentó que desde joven viene a la plaza, que trabajó desde antes de este gobierno actual como cuidador de estas áreas, le duele mucho que hoy en día no se tomen en cuenta estos espacios que se están perdiendo y más que todo, por los jóvenes que no preservan lo que tienen hoy, todo lo contrario, destruyen todo a su paso y es de notar que no hay seguridad en el sitio, "pues ya he visto a muchos niños fumando y otras cosas así como si nada, mientras muchos pelean y hablan de la situación económica que todos sabemos, los jóvenes se pierden cada vez más, por eso esto no cambiará nunca, pues ¿si no hay jóvenes conscientes como tendremos adultos coherentes?" De verdad no contamos con encontrar en personas en este tipo de situación con este tipo de pensamientos, pero es más claro que la experiencia tiene mucho que mostrarnos.

Mientras estábamos con el Sr. Anselmo se nos acercó esta anciana, él nos dijo que es una guajira (una tribu indígena venezolana) que siempre se la pasa por estos alrededores intentando vender pulseras. No la dejamos por fuera, también le dimos arepas e intentamos hablar con ella, pero no la entendíamos aunque nos hacía gestos de agradecimiento, de verdad no entendíamos lo que nos quería decir, pero otra señora que pasaba por el lugar nos dijo que era la manera de agradecer de ella, estaba descalza, muy descuidada y comía con mucha hambre por lo cual le dimos otra arepa y pudimos observar que se comió la mitad de la segunda y guardó la otra mitad, pensamos que se la comería luego.

El Sr. Clemente, de Nueva Esparta con 71 años todavía es un señor muy fuerte a pesar que nos dice tener una enfermedad la cual no nos quiso revelar, primero nos trató con un poco de duda, pero luego disfruto su arepa como todos los demás. Luego nos habló más de él, fue pescador alrededor de 1970 cuando era joven y nos contó con orgullo que era capaz de pescar con una técnica "de chinchorro" con otro compañero, ellos dos eran los mejores, hacían el trabajo de 6 hombres ellos solos y ganaban mucho dinero, tenía tres mujeres y fue su bancarrota, ahora vive con su hija menor y dice estar pagando las facturas de la vida, pues la hija que hoy en día le da un techo fue durante pequeña negada por él mismo.

Gregorio, de 66 años solía trabajar las tierras con la familia Pérez (nos dice que era una familia adinerada con muchas tierras) trabajó para esta familia durante 42 años hasta que ya tenía una avanzada edad y simplemente lo despidieron, un día no lo dejaron entrar más a la finca y listo, incluso nos dice que no le pagaron varias semanas que se le adeudaban, pero que gracias a dios ya había sacado a sus hijos a una vida mejor y aunque él lamenta que no estén en el país y él este sólo, se siente muy orgulloso de ellos.

Un par de señores con unos instrumentos se acercaron a nosotros y nos preguntaron ¿a que precio vendíamos las arepas con jugo? y al explicarles lo que estábamos haciendo nos preguntaron si les podríamos dar una arepa para tener fuerza para el trabajo, les preguntamos ¿de que trabajaban? y nos contaron que son músicos de calle y que de esa forma se ganan la vida. Isidro en al acordeón y Oreció en la carrasca. No solo nos agradecieron las arepas, sino que nos tocaron tres canciones alegremente, y de verdad que son buenos pues rápidamente tenían un pequeño público a su alrededor.

Una Sra. con mucha pena se nos acercó y nos pidió una arepa para su nieto que no comía nada desde el almuerzo de ayer, obviamente no nos negaríamos a su solicitud, pero no nos quiso comentar mucho sobre ellos, más que ella era su abuela y que su hija se lo dejó para cuidar hace un año y no supieron de ella más nunca. (Nos imaginamos que por eso no nos quiso contar más).

Recuerdan la Guajira que nos encontramos temprano?

Bueno, ella volvió con su familia y al vernos nos rodearon, por un momento nos asustamos ya que de verdad no le entendíamos nada, estaba con un pequeño y uno de los señores con los que ya habíamos hablado en la plaza nos comentó que esa era su familia y que la media arepa que había guardado era para compartir con ellos, le dimos una a cada uno con su jugo y estaban desesperados al comer, incluso tuvimos que calmarlos un poco.

Como gesto de agradecimiento de parte de la anciana obtuvimos un regalo.

Fue un gesto muy bello y será un gran recuerdo para el grupo #abrazonacional, sentir que lo estamos haciendo bien se siente bien, todos nos agradecían de corazón y nos arrojaban bendiciones que fueron muy bien recibidas de nuestra parte.

Un gran abrazo a todos los lectores que se interesaron en esta labor social, si quieren saber más sobre las personas que ayudamos no duden en preguntarnos, mil gracias por apoyarnos.