El caminante observa como la lancha se aleja de tierra y ve la edificación nueva especial para el turismo; recuerda que en su tiempo de niñez, esas edificaciones no se les permitían a los hoteleros, por aquello de conservar el ecosistema; sin embargo los tiempos y las prioridades cambian. Una joven le interrumpe sus pensamientos, con el comentario de que los tiempos de relax son únicos y más con la brisa caribe, y pregunta: ¿qué opina del tiempo para el descanso?
Sabes, -le contestó lentamente mientras coordinaba sus palabras- el comunicador y pensador espiritual San Agustín, cierta vez respondió al mismo interrogante diciendo que para él el tiempo no tiene explicación; porque los humamos todo lo miden con calendarios, días y horas; imagínese a la reina Isabel I, cuando expresó en su lecho de muerte: -entrego todo lo que tengo por unos minutos más de vida-
Sólo te puedo decir:
¡Disfruta la belleza integral presente con todo tú ser, olvídate de la noción del tiempo!