Esta es una flor de Cayena, sencilla. La foto no le hace honor, a su hermoso color Salmón.
Ha llovido estos días, en mi jardín. Las plantas están de colores. Bellos colores. Las hortalizas, agradecen el agua del cielo. Están produciendo sus frutos. Grandes y hermosos pimentones. Las plantas de ajíes, aun crecen. Pero también están bonitas. El berro, está fuerte, de hojas verdes y, grandes, en forma de corazón. Las lechugas, creciendo, pero están muy bien formadas.
Está llena de pimentones. Es una planta de menos de 40 cms. Tiene cinco grandes pimentones verdes.
Las lechugas están con ese bello color verde provocativo. Pequeñas y vigorosas.
El berro silvestre. Lo conocen? Vean,les provoca colocar esto, en una ensaladera? Está cubriendo mis remolachas y una pequeña planta de ají.
Los cactus, no son de agua, pero cuando se va la lluvia, llega el inclemente sol. Ellos también agradecen esa agua de Dios. Porque acá, en Venezuela, hace tiempo que no hay invierno. Llueve cuando quiere o cuando puede. Es tan extraña la lluvia, que cae sobre una calle y, en la otra está todo seco. Ni se enteran las personas, que llovió.
Es una suculenta graptoveria mojada. Sencilla y hermosa.
El agua, se deposita en las flores y, le da otro aspecto. Es muy relajante, el efecto que provoca en mí. El ver esas gotas en sus pétalos, me da una sensación de serenidad. De todo está bien. Todo está en control. ¿Es eso cierto? Todo está en control? solo que nosotros no lo sabemos.?
Por un momento, ese momento que yo pase en el Jardín, viendo la vida que deja por detrás la lluvia. Es un momento genial, de esperanza, de vida. Ohh Dios, no lo cambio, por otra visión. Es grandioso.
Sembré albahaca, esquejes, claro. También sembré esquejes de romero. Y mis plantas de Cúrcuma y Jengibre, están cada vez más frondosas.
La albahaca está frondosa, No agradece tener agua en sus hojas, de inmediato, le salen las manchas que observan. Son hongos fáciles de adquirir con la humedad.
El romero no le importa mojar sus ramas.
Mi querida Cúrcuma, una planta medicinal. Todos deberían tenerla.
Los Anthurios, también están floreciendo. Sueltan las espigas para arrojar el capullo. Otros, ya forman el capullo y, otros finalmente, están en flor.
Por hoy, termino mi pasada por la belleza, del jardín mojado. Gracias por leer mi blog.
Dios continúe con sus bendiciones para todos.