Alex Van de Sande, encargado de Ethereum Foundation, ha presentado una propuesta para un grupo de seguros que disminuirá el riesgo de divisiones de red derivadas del deseo de recuperar fondos congelados debido a fallas de código en contratos inteligentes.
Van de Sande, escribió en una publicación que crear un contrato sobre recuperación con un fondo de seguro específico reduciría el incentivo que una persona o grupo tendría para buscar un tenedor polémico y así poder recuperar parte o la totalidad del valor perdido debido al error. Así es como funcionaría el sistema.
Los desarrolladores asegurarían sus contratos inteligentes bloqueando Ether durante un período predeterminado de años en un contrato de recuperación. A cambio, recibirían un número igual de “tokens de recuperación Ether”, que luego podrían mantener o vender a los especuladores.
Si el Ether asegurado por los contratos se congela, el proceso de recuperación permitiría a los titulares canjear sus tokens por un porcentaje equivalente de los fondos del grupo a una tasa del 90%, con el 10% restante utilizado para financiar el fondo de seguro general de todas las fichas.
Por otro lado, si el período de bloqueo pasa y no se inicia ningún proceso de recuperación, los tokens se destruirían automáticamente y el emisor recibiría nuevamente su Ether bloqueado, manteniendo todos los beneficios obtenidos vendiendo tokens de recuperación al comienzo. El contrato de recuperación estaría regido por titulares de fichas, que podrían votar sobre decisiones tales como qué contratos debería asegurar el fondo.
Aunque un obstáculo para el sistema propuesto parecería ser que los tokens de recuperación probablemente serían clasificados como valores por varias agencias reguladoras. Sin embargo, tal vez el componente más controvertido de la propuesta involucre el lanzamiento del fondo con más de 513.000 ETH en pasivos mediante la emisión de tokens de recuperación a las víctimas de fallas de código en la biblioteca de contratos de billetera multi-firma de Parity.
Además de aplacar el riesgo de una división de red polémica, Van de Sande argumenta que esto convertiría a las víctimas en las partes interesadas del nuevo fondo. Esto, a su vez, probablemente le dará al grupo una mayor posibilidad de ganar tracción cuando se lance.