La Calzada del Gigante (en Irlanda) es un lugar con unas 40.000 columnas de basalto, generalmente de forma hexagonal, resultado del enfriamiento relativamente rápido de la lava en un cráter o caldera volcánica, que ocurrió hace unos 60 millones de años. Fue declarada Patrimonio de la Humanidad en 1986 y Reserva Natural Nacional en 1987.
Cuenta la leyenda que dos gigantes, uno de Irlanda y otro de Escocia, se llevaban muy mal y continuamente estaban tirándose piedras. Tantas se lanzaron que se formó un campo de piedras sobre el mar.
El gigante escocés decidió cruzar por ellas para derrotar a su adversario. Pero la mujer del gigante irlandés le vio y decidió vestir a su marido de bebé. Al llegar el escocés y ver un bebé tan grande, pensó que su padre sería el triple. Así que huyó pisando muy fuerte las piedras, para que se hundieran en el mar y el gigante irlandés no pudiera seguirle.
El resultado es este lugar tan mágico, donde puedes saltar de piedra en piedra, recorrer las colinas circundantes o sencillamente admirar la enigmática geología que ha creado uno de los espacios naturales más extraordinarios de Europa.