Píntame un nuevo día, lleno de ilusión y felicidad.
Quizá... un hermoso día en el que, sólo tenga cabida la: ALEGRÍA.
Mi vida continua en este día especial, y sólo deseo que mis pasos, a ser posibles certeros, recorran la tierra
y mis sueños.
No, no tengo abuela, y en realidad tampoco es mi cumpleaños. Sólo trataba de imaginarme... qué palabras, de mis seres queridos y allegados, me gustaría escuchar el próximo 28 de Febrero.
Este pensamiento surge a raíz de haber visto a un hombre, un vagabundo, que sostenía un cartel ( un trozo de cartón, escrito con mil faltas de ortografía) el cual rezaba algo así:
" oy es er dia de mi cunpleaños, si no me dan dineros, armenos felicitarme"
Bien temprano, a eso de las 8 de la mañana, el hombre desaliñado y cincuentón, bebía alegremente de un brick de vino, barato y peleón. Dos perrillos a su lado ( muy bien alimentados y acicalados, todo hay que decirlo), movían el rabo juguetones, mientras él les acariciaba ofreciéndoles una gran sonrisa, que ni era bella ni perlada... pero sí, sincera y por lo tanto hermosa.
No, no os mentiré, no le he felicitado; tampoco le he dado dinero. Podría poner mil excusas... llegaba tarde a trabajar, no tenía suelto... el caso es que llevo todo el día dándole vueltas, y decidí que, cuando saliera de trabajar compraría algo para cenar y se lo daría.
De regreso a casa, he pasado por último lugar donde le vi, y no, no estaba. Así que al menos, y de manera simbólica, le deseo a él , de manera especial, y a TODOS los que cumpláis años hoy, MUCHAS, MUCHAS FELICIDADES.