El crío fue encontrado en abandono en la calle, la policía local lo ha llevado a un hospital universitario; luego del primer día, el pediatra sugiere hacer algunos exámenes de sangre, para detectar si hay síntomas de anemia, y algunas posibles enfermedades, que se pueden adquirir por malos cuidados alimenticios. Aquel niño mordió a cuanto enfermero quiso cogerlo, para llevarlo al laboratorio, ¿suponía que lo podrían pinchar con una aguja?
El pediatra y profesor, lanzó el desafío a los estudiantes, de persuadir al crío para que colaborará con la tarea. Algunos se preguntaron: ¿tenemos que aprender técnicas de persuasión? -Creería que sí- recordemos las palabras de Julio César en el imperio romano: “Es más fácil encontrar hombres dispuestos a morir, que encontrar a los que están dispuestos a soportar el dolor con paciencia”