Hola amigos de writings & reviews. Hoy escribo tocada por la situación social de mi país y de otros países del mundo donde la migración es una realidad campante. Algunos jóvenes se marchan buscando nuevas ilusiones. Muchos padres se han separado de sus hijos y de sus hijas, tal vez, parte de ellos (madres, padres, abuelas, abuelos, etc), no los vuelvan a mirar...
Pero, el ser humano busca formas de estar junto a sus seres queridos, a pesar de la distancia. Yo, escribí estas líneas en una imaginaria escena donde una madre y su hija se encuentran de formas distintas. Quizás, después de todo, no sea sólo imaginación. Las cosas del alma son misteriosas y el amor siempre encuentra caminos...
Les invito a continuar leyendo. Espero les guste.
OCASO Y ALBA
Despacio abrió sus manos y levantó los brazos. De frente al mar, la corriente de aire golpeaba su rostro. Una inmensidad de océano las separa. Pero, la distancia se hace leve cuando el amor tiende puentes.
En otra orilla de una playa frente al mar, unas manos más jóvenes se abrían y unos brazos con alas de fuego expendían su calor. El hechizo de un hilo invisible las une, como ha unido por siglos los cordones de platas a las mágicas danzantes bajo el ritmo sagrado de la luna.
Todo es real y nada es cierto en esta ilusión donde existimos. Cada respiro es un segundo que acontece en una dimensión donde están juntas. La vida tiene mil colores y millones de formas. Hay siempre alternativas para encontrarse. Un palpitar late en la memoria. Allí, donde el vacío deja un recodo, se llenan las caricias y los sueños.
Han abierto la botella del genio que une a los corazones, hija y madre! Un misterio adorna los sentidos de las almas. De este lado el sol va remontando el cielo y sus ojitos moros suspiran alegres por lo probado. En el ocaso de la otra orilla, ella contempla la caída y corren las lágrimas fugitivas hacia la olas. Su cuerpo cansado resiste con con esfuerzo la espera para otro retorno. Ella, niña, radiante, amanece en las tiernas manos del alba...
GRACIAS POR LEERME!
