Saludos amigos de la comunidad Steem, a ver. ¿Quién me dice si la comida rápida no es deliciosa.? Pues muchos ¿cierto?. Una gran hamburguesa, con carne o pollo, ensalada, salsas, papas fritas y un refresco, una delicia que en exceso es dañina. Muchos la denominan como comida chatarra, por ser una comida de altos contenidos grasos, sal, azúcares, sustancias aditivas y condimentos, que irritan muchas veces nuestro tracto digestivo. He leído en muchas publicaciones de OMS(Organización Mundial de la Salud)que los contenidos calóricos de estos bocados, nos crean adicción, o sea, se prueban una vez y deseas seguirlo haciendo. Acá en Venezuela, le decimos comida rápida o chatarra, esta variedad ha crecido y ha creado mucha demanda, principalmente en estos tiempos de pandemia, cuando no puedes ir a la calle a comerlos, porque los sitios siempre están repletos de personas disfrutándolos. Siempre acompañamos la hamburguesa o el perro caliente con una gaseosa de nuestra preferencia o una bebida a base de malta. Se venden por combos a precios que oscilan desde 1 a 4 dólares, según el contenido de los mismos.
Si bien es cierto que, comparados con otros alimentos, son de bajo precio, están a la vuelta de la esquina y si por casualidad están alejados, disponen de la entrega a domicilio, hasta cierta hora de la noche. Esta comprobado a nivel mundial, que son del gusto de un gran porcentaje de personas, entre adultos y niños, pero también son la causa de la obesidad, problemas de hipertensión, diabetes y problemas a nivel digestivo, ya que en muchos casos los consumen en las oficinas, donde las personas pasan la mayor parte del día sentados o sin mucha actividad y en los hogares por las noches, es la preferencia. Yo siempre he dicho que todo en exceso es malo y recomiendo consumirlos como lo hacemos en casa, una que otra vez y el fin de semana que compramos, el resto de la semana siguiente consumimos, vegetales verdes, granos y jugos naturales. Es imposible dejar de saborear una rica hamburguesa con papas fritas. A mi preferiblemente doble queso.
Como todo, también tienen su desventaja, no se pueden recalentar o refrigerar, ya que pierden su sabor, textura y frescura, además de poli saturar aún más sus grasas. Todos después de ser adultos modificamos nuestro régimen alimenticio, comparado con la ingesta de alimentos cuando niños, la globalización, la transformación social y la economía a ritmo cabalgante, nos obliga a comer algo rápido si estamos en la calle y nos falta tiempo para llegar a casa. Existen grandes franquicias de comida rápida, pero es mejor prepararlas en casa, donde estamos atentos a ser pulcros, lavar bien los vegetales y preparar bien las carnes, además, de agregarle todo cuanto nos agrade añadirle. Vean la que me compré este fin de semana. Es la especial de un sitio exclusivo de mi localidad. Su valor 2,02 dólares. Pan, carne, ensalada, salsas, doble jamón y doble queso amarillo, acompañada de papas fritas y kétchup. Una verdadera delicia.
