Nuevo Concurso: Mi Colección.

Les presento parte de mi colección de figuras de payasos, la cual comencé siendo una adolescente por allá por 1978 y que actualmente alcanzan más de 200 figuras en estilos variados, materiales diversos entre otras. Particulares personajes que enuncian alegría y versatilidad, relacionarlos con tiempos felices es frecuente, sin embargo el cine y la televisión cimentados en historias no comprobadas, han trasformado su sonrisa sosegada y sus coloridos trajes en desagradable risa y color de angustia y temores.

Creo que desde que coexistió el primer niño con el primer hombre, vivió el payaso, el cual ha recorrido por diversas rutas y distintas pendientes, para crear un personaje igual a todos y distintos a cada uno de sus antepasados.

Actualmente y ejecutando un ejercicio de veracidad, mientras el vestir y el maquillaje crecían en importancia, el payaso como personaje ha desandado. Antecedentemente había gentileza ahora encontramos mímicas y vocablos grotescos.

Asociado a la infortunada contribución que el Cine le ha marcado. La gestión del artista es instruir, los payasos siempre han sido artistas. Recobremos la mágica función del PAYASO.

Una colección además de objetos está cargada de recuerdos, de momentos especiales, debe ser ordenada, clasificada para que realimente sea una colección y no un simple agrupamiento de cosas. En la mía hay una vida de gente que pasó, de cumpleaños, de sitios que visité, recuerdos en esas caras sonrientes que no tienen pinta de asesinos, en esos coloridos rostros que me llevan a ligares de mi mente que solo una colección atesorada puede hacer.

Invito a @enrisanti @genomil