Desde pequeño quise que mi hijo jugara fútbol, y ese momento llegó hace 2 meses cuando empezó a practicar este lindo deporte en la categoría Baby (5-6 años). Y qué mejor país para jugar fútbol que la Argentina, cuna de campeones y del mejor jugador del mundo.
Los martes y jueves José cuenta ansioso las horas para ir a la práctica vespertinas. Contra viento y marea yo lo acompaño a cada práctica y lo motivo en el campo de juego para que siga aprendiendo, pero sobretodo que se divierta, porque al final esa es la idea, divertirse.
Quién quita y sea el futuro Messi y así sacar a toda su familia de la pobreza, eso sí, yo seré su mánager y mano derecha.