Hola, mi querido diario

Estamos en la semana flexible en Venezuela, por lo que podemos estar fuera de nuestras casas hasta las 6 de la tarde y la mayoría de los establecimientos comerciales están abiertos. También, es la semana que traen a la Yeye, mi sobrina pequeña, a casa, por lo que de una u otra forma nuestra rutina cambia considerablemente porque no solo aprovechamos para comprar sino que tratamos de dedicarle nuestro tiempo a la Yeye, ya que no la veremos sino en la próxima semana flexible.

Me desperté temprano porque pensé salir al supermercado a comprar algunas cosas que hacían falta. Mi hermana y mi sobrina mayor ya estaban despiertas por lo que habían hecho arepas. Desayuné y luego me dispuse a arreglarme para salir. En eso se despertó Yeye y se antojó en salir conmigo. Mi hermana y mi sobrina decidieron, al ver que la Yeye quería salir, acompañarme al centro de la ciudad a hacer mis compras. Es la primera vez que salen, por lo que me preocupé.

Preferí ir a un centro comercial, aunque no es el sitio más económico, por el simple hecho de no buscar de un lugar a otro. Aunque las colas eran interminables, salimos más o menos rápido, a pesar de que la Yeyé hizo que la estadía se hiciera interminable.

Cuando llegamos a casa, mi madre ya tenía el almuerzo hecho. Gracias a Dios porque llegué cansada y hambrienta. Cuando voy al centro sola no me desgasto tanto, pero la Yeye le descarga la batería a cualquiera. Cuando llegué, mi madre me preguntó que si quería llevarla otro día al centro: paso, le dije. Jajaja.

Luego de comer y hacer la siesta, me puse a comentar algunas publicaciones. No sé pero siento que todo ha caído. En fin, mientras comentaba recordé que había comprado helado y lo repartí entre todos los que estaban en casa. Creo que nunca había visto que se contentaran al verme.

Más tarde vino mi mamá y nos dio “manga”. La “manga” es como el mago pero más carnosa y jugosa. Realmente estuvo deliciosa.

Ya en la noche se fue la luz. Aunque me enojé algo, pensé que era mejor así porque de esa forma descansaría de todo el estropeo del día. Me recosté y cuando vi el reloj, ya eran las 12 de la noche. Preferí dejar mi diario para hoy.
Mientras escribo, pienso cuál será la mejor forma para que Dios nos bendiga, cuál será la mejor manera de hacer nuestro diario para que recibamos un voto de Steemcurator.

HASTA UNA PRÓXIMA LECTURA, AMIGOS

_{Gracias a #Thediarygame, @steemcurator01 y a @steemiblog por la organización de este reto}

*Todas las fotografías fueron tomadas con mi celular Blu C4CO5Ou. Android dua y trabajadas en Canva