Decoración en Av. Los Leones, Barquisimeto.
Querido diario, hoy me levanté temprano porque iba a salir en la mañana, por lo cual después de escuchar la alarma estuve un rato pensando en mi vida (quería seguir durmiendo) y aproveché para hacer algunos estiramientos.
Cabello.
Me pareció gracioso que justo al levantarme y al verme al espejo, estaba con un estilo con el que sin duda saldría a la calle, aunque tuviera frizz, pero las ondas se veían muy bonitas.
Luego de eso, fui a asearme y prepararme para salir, había concertado una cita a las 9 am pero sabía que iba a llegar un poco tarde. No desayuné pero me llevé las arepas en la mochila.
Iba al cumpleaños de mi suegro y como me sentía mal llegando con las manos vacías, le compré un pan de tunja grande para que acompañara con su café. Pero en mi camino, pensando de todo y de nada al mismo tiempo me pregunté cuántas aceras de las comunidades en Venezuela están así, quebradas y descuidadas. Por ejemplo aquí en Barquisimeto, he visto muchas.
Pan de tunja.
Acera.
Llegando al sitio de encuentro, me di cuenta que había una decoración muy bonita con paraguas y no pude resistir en tomarle una foto, seguro de noche se ve mucho mejor porque si detallan bien, la decoración también tiene bombillos.
Decoración en Av. Los Leones, Barquisimeto.
Al llegar a la casa, ayudamos con la ensalada, picando el tomate, la cebolla y el cilantro, con un cuchillo y con un picador también para que los trocitos quedaran pequeños y parejos. Esto, mientras la carne se asaba en la parrilla que se dispuso, tenía muy buena pinta.
Ensalada.
Carne a la parrilla.
Después de picar para la ensalada, desayuné (como al mediodía) las arepas que había llevado (se me olvidó tomar la foto, así tendría de hambre) y mientras todo estaba listo y se recibían a los invitados, tuvimos tiempo de escaparnos un momento para ver a las gallinas, pero en especial una de ellas que hace poco había tenido pollitos.
Ella estuvo un tiempo en mi casa porque una vecina se la regaló a mi mamá pero no podíamos tenerla bien y libre porque no teníamos gallinero y hay gatos en casa. Entonces se fue a vivir donde mis suegros. Ya está grande y resultó ser muy buena mamá.
Luego llegó la hora del almuerzo en la cual agradecimos grandemente el plato que íbamos a disfrutar: carne a la parrilla con yuca y ensalada.
Gallina y sus pollitos.
Almuerzo.
Después de comer, estuvimos un largo rato conversando, jugando e incluso yo me puse a pintar unas tarjetitas de una manualidad que tenía pendiente por terminar. Un poco más tarde estábamos preparando la mesa para poner la torta y cantar el cumpleaños. Aparte de la torta había quesillo que estaba delicioso.
Creo que todos quedamos muy satisfechos con la comida, tanto con lo salado como con lo dulce y conversamos hasta que fue la hora de irse.
Y así terminó mi día.
Pintando.
La torta de cumpleaños y el quesillo.
"Quien no se siente no come torta".
¡Hasta la próxima!
Nota: Arte de mi autoría. Apps utilizadas Ibis Paint X, Inshot y Canva.
Fotografías tomadas con un Smartphone Redmi 10 C y Redmi 13 C.