Buenos días Hermosas Almas. ¿A qué lugar de Venezuela no llegan los mercados de nuestros compatriotas conocidos como "Los Gochos"?. Mi día comienza con el deseo de buscar frutas y vegetales frescos y particularmente, remolachas. Soy afortunada de caminar unos escasos metros y llegar al mercadito. Encuentro gente alegre, gente fresca, gente amable. Gente que se cuida, italianos, portugueses,gente joven, gente sabia.
Rara vez se consiguen en el supermercado las remolachas con todo y hojas. Estas son ricas en proteínas, hierro, calcio, magnesio, vitamina A y C, entre otros. Para una vegetariana como yo, es oro en polvo. Una señora mayor en la cola me dice... ¿y te las vas a llevar así con todo y hojas?... Y otra le responde... Señora, eso se come!
La mejor forma de ingerirlas, son frescas. Acompañada de brócoli, tomate, cebolla, aceite de oliva y sal, son una delicia. La combinación de texturas, lo crocante de los tallos y los arbolitos de brócoli no tienen nada que envidiar a las proteínas animales.
La excusa perfecta para preparar este pecado, el cumpleaños de la suegra; además es la única torta que le gusta al hombrecito de la casa y también confieso que es la única torta que sé hacer.
Y llegó el turno de la remolacha, que es un milagro hecho tubérculo. De igual manera, la mejor forma de consumirlo es crudo y para ello me valgo de un extractor y me tomaré ese jugo en pequeñas dosis.
Que mejor compañía que la del Ser que posee la sonrisa que más amo, el que sazona mis días con un carrusel de emociones. Con el, sin duda, todo es divertido.
Todas las fotos fueron tomadas desde mi teléfono personal
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