Los hombre de El Señor, le tomaron diferentes fotos andando por las calles sola y sucia. Una de los hombres del Señor, la conocía y le daba comida todos los días.
Ese hombre tuvo un hijo que jugaba con Isa, todos los días. Hubieron muchos días que Isa durmió en la casa de este hombre.
Isa no la traumaron cuando se la llevaron sino, al contrario fue lo mejor que le pudo haber sucedido, por lo menos, eso era lo que ella pensaba.
Pasó de no tener nada a tenerlo, todo. Antes no tenía comida y ahora le sobraba, ya no tenía que mendigar ni pedir a nadie. Antes sólo tenía un vestido y se bañaba semanal o cuando el hombre de El Señor, la llevaba a su casa y su mujer le daba jabón y le lavaba el vestido y ahora se podía bañar cuando quisiera y tenía muchos vestidos para ponérse.
Para Isabel, El Señor fue su héroe y era el mejor. Siempre buscaba de hacer todo lo que él quería o lo que le decían, que él quería aunque, no era tonta y sabía cuándo la querían engañar para hacer lo que ellos querían.
Espero les haya gustado.
Hasta la próxima.
Introducción
Capítulo I
Continuación del capítulo I
Capítulo II
Capítulo III