The Diary Game, julio 16, 2021: Un Día Ajetreado, y Mi Primer Pago | Por @thelostprophet

Inicia un nuevo día. Tal y como de costumbre, pensaba que sería uno de esos días rutinarios de ir de compras, quizá con alguna que otra salida, pero nada fuera de lo normal, tal y como suele suceder en esos días. Me levanté mentalizado en salir temprano, para regresar pronto del mercado. Hasta allí todo bien. La noche anterior conversé con mi madre sobre ir juntos. Por motivos de salud ella estuvo un par de meses sin siquiera poder salir de casa, tomando yo las riendas de todo relacionado a las compras, así que creí que, al estar mucho mejor, podríamos ir junto, como a ella siempre le ha gustado encargarse de ello, ya que sabe mejor qué comprar y qué no. Además le serviría como ejercicio la caminata. Al conversar por la mañana, me comenta que quiere ir a vacunarse, allí el primer cambio en mis planes (aunque claramente acepté)

Luego de organizar un par de cosas y del aseo personal, fui a tomar el desayuno.

Durante ese tiempo, repasaba lo que debía hacer, ya que soy del tipo de personas que, si organiza una agenda para el día no le gusta cambiarla. Solo si es algo de fuerza mayor. Bueno, dejando la cháchara, continúo. Era algo "sencillo" (sí, muy entre comillas) salir, llevar a mi madre a vacunarse, pasar por el mercado para hacer las compras, regresar a casa, para salir nuevamente a terminar un par de cosas pendientes y pasar por una tienda para comprar precios. Sabía que sería ajetreado, ya que todo eso debía hacerlo en el transcurso de la mañana, debido a que en Venezuela existe una "semana radical" por el tema de la pandemia, donde solo se trabaja medio día, y es justo esa la que está en curso.

Si hay algo que sabemos quienes vamos a hacer mercado es que no se sabe cuánto tiempo se estará de compras, sin importar que sea poco o mucho lo que se comprará

De camino, y entre que olvidamos en un par de cosas y tocó regresarnos al poco tiempo de haber salido, mientras hacíamos las cuentas para saber qué podríamos comprar, sumado a que nos topamos con una amiga de ella, y que, por la rutina, entre tanto hablar seguimos el camino de costumbre al mercado, olvidamos por completo ir donde mi madre debía vacunarse. Algo que deberíamos hacer hoy, justo al finalizar de redactar esto. Llegando al mercado, y como de costumbre, pese a ser semana radical el lugar estaba abarrotado de gente, sabía que tomaría un poco más de tiempo realizar las compras.

Si hay algo que me encanta de esta plataforma es que recompensa el talento, el esfuerzo y la dedicación de las personas que hacemos vida en ella. Y yo no sería la excepción. Hace un par de días recibí el primer pago por uno de mis post, y luego de hacer el trámite con @orinoco (a quienes agradezco mucho) y cancelar algunas deudas pendientes, dejé el resto para las compras de la casa y comprar un par de metros de tela para que mi hermana.

Luego de poco más de una hora de recorrer el mercado un par de veces para conseguir mejores precios, se pudo comprar algunas cosas que necesitábamos, y llevarle otras al menor de mis sobrinos, quien está en casa, emprendimos el camino de regreso

Al llegar, hice el recuento de todo lo que se pudo comprar:

Mientras preparaba café para salir nuevamente a terminar mis diligencias, me avisan que mi sobrino tenía fiebre. Otro imprevisto. Salí con mi hermana a un hospitalito cerca de casa y allí nos facilitaron un medicamento para bajarle la fiebre. Ahora, hay algo que tiene este niño y es que puede estar muy mal, pero jamás deja de sonreír y de jugar, aunque ni fuerzas tenga. Una cualidad sobresaliente para un niño de dos años.

En cuanto se tomó el medicamento, y luego de almorzar, salí a terminar de hacer lo que tenía planificado. Esta vez con mi hermana.

Estuvimos visitando un par de tiendas, ya que necesitaba comprar precios de algunas telas para que ella necesita, y ojear un poco el precio de los zapatos.

Y cuando pensé que ya era todo lo que haría durante el día, recordé que esperaba la visita de la amiga de mi madre para hablar sobre algunos negocios. Así que salí a comprar un par de cosas para atenderla como era debido. Durante todo el día fue poco el tiempo que tuve para descansar como tal, ya que, al llegar la noche tuve que salir nuevamente a buscar algo para la cena. Y fue allí, luego de la cena que pude "descansar"

Pero a pesar de los imprevistos, de la preocupación por el niño, y el corre corre, no puedo quejarme. Pasé la mañana con mi madre, salí con una de mis hermanas, algunos de los planes que tenía ya están en marcha, y todo en un día, gracias a Dios, a quien le debo todo lo que tengo.