Debía dedicarme a mover la tierra de la parte del huerto que esta vacía. Allí había sembrado hace casi un mes, por los días 14 de julio, algunas semillas de tomate que no se dieron. Siguiendo la sugerencia de mi hermana hice una siembra directa. Eso significa que no use semilleros para germinar las semillas sino que las sembré directamente en la tierra. En lo personal no me gusta este sistema pero quería probar a ver como se daba. Considero que el error que cometí, que hizo que no se dieran las matas, fue que sembré las semillas muy profundas. Esta vez corregiré ese error y lo volveré a intentar este viernes que viene. Para ese día será fecha 14 del mes y ya el ciclo lunar del cuarto menguante, ideal para la siembra, estará activo.

Aproveche para colocarle abono a la tierra. Como está lloviendo todos los días el agua ayudara a que la tierra absorba el abono y así esté lista para el viernes o sábado. Quería aprovechar de echarle agua hirviendo a esa parte del huerto. Leí en la página de la red donde me asesore sobre el huerto que el agua hirviendo era ideal para eliminar la maleza o mal hierba pero me detuve en hacerlo cuando recordé que esa tierra tiene lombrices y el agua caliente las mataría. Las lombrices cumplen una excelente labor en cuanto al abonado de la tierra. Así que desistí del uso del uso del agua caliente como mata maleza. Por ahora.