Escrito original de @theatrorve
Martes 08 10 2024
#ScoutsysusAmigos
¡Saludos!... Un cordial saludos a todos los miembros de la comunidad #ScoutsysusAmigos y al resto de la gran familia #Steemit.
Acá mi participación en el concurso JUEGOS DEL AZAR, ¡SUERTE O MALA SUERTE! que organiza @edgargonzalez en esta comunidad.
¿Qué si tengo suerte en los juegos de azar? Se los pondré de la siguiente manera.
Cuando era niño, quizás unos 8 o 10 años, asistí a una fiesta de un vecinito. En las fiestas de mi época infantil se realizaban muchos concursos. Las formas de los mismos eran muchísimas, lo cierto es que siempre había premios para los ganadores.
Gane uno de ellos y mi premio fue una pistola de vaqueros de plástico. Era bellísima, el color de la misma variaba dependiendo de la intensidad de la luz que recibía. me sentía contento con mi premio.
Llego la hora de la comelona de torta y coloque mi pistola recién ganada encima de una silla para recibir mi plato de torta con gelatina. Pues bien, solo basto que dejara mi premio allí para que de manera casi inmediata un niñito gordito se sentara encima de ella y pasara a mejor vida.
Pues así ha sido por lo general mi suerte en los juegos de azar. Desde pequeño no tenía mucha suerte en ellos y cuando lograba algún premio, la vida conseguía la manera de arrebatármelo.
Es quizás por ello que no soy muy adepto a ellos. Por lo general cuando participo en una actividad de azar lo hago de manera de entretenimiento y no por lograr un objetivo definido que, por lo general, es ganar un premio.
Y no es que esté de acuerdo o no con los juegos de azar, sino que simplemente no me arriesgo por las experiencias que he vivido anteriormente.
Cuando participo en alguna rifa organizada por algún conocido, por lo general lo hago como manera de colaboración a la causa. Cuando he jugado lo que algunos llaman quiniela, otros polla, lo he hecho como para darle sazón a los juegos de futbol. Esto por lo general en temporadas como mundiales de futbol o copas importantes.
Recuerdo que en la época cuando tenía el centro de copiado en la Universidad de Carabobo, sede Aragua, aprendí a jugar caída. ¿Saben? Ese juego con cartas españolas que vas ligando hasta formar los llamados cantos y que al ganar logran puntos y quien alcance la meta gana el total de la apuesta.
Esto lo hice mas por compartir con los compañeros que participábamos en dicho juego de azar.
Sin embargo, la mayoría de quienes participan en los distintos juegos de azar existente lo hacen con la convicción de ganar dinero y con ello lograr mejoras. Eso quizás no es una buena opción.
Es cierto que existen persona que poseen ese don natural para los juegos de azar. Otros lo aprenden. Es que los juegos de azar, por lo general, son juego de probabilidades.
Es quizás por ello que existan personas que aprenden a leer las probabilidades y con ello tener más suerte que otros. Aunque las estadísticas o probabilidades no dan un ciento por ciento de certeza, aumenta en gran cantidad las posibilidades de conseguir ganar.
Conozco a personas que viven muy bien gracias a dedicarse, podríamos decir de manera profesional, a los juegos de azar. Pero son más lo que viven una vida en quiebra gracias a entregarse a la diosa Tyche.
En muchos casos, los juegos de azar se consideran una enfermedad mental que ha llevado a muchos a perder todo lo que tiene en busca de conseguir fortuna en su vida.
En este punto me parece muy lógico pensar que los juegos de azar se convierten en una gran distracción capaz de desviar toda atención y esfuerzo por alcanzar metas en la vida.
Para muchos, es una manera de facilismo. El atajo más viable para conseguir surgir en la vida sin la necesidad de poseer conocimiento académico o laboral para lograr el fin deseado.
En la actualidad se vende mediáticamente la idea, a través de modelos mostrando casi el total del silicón o de la parte posterior de su cuerpo que, para conseguir fortuna, solo basta arriesgar en un juego de azar lo poco que posees.
Esto se ve más en las transmisiones de algún evento deportivo. En mi caso, lo veo mucho cuando veo a través de la caja boba algún partido de futbol. Y creo que esto genera muchos adeptos ya que falta poco para que las imágenes de las casas de apuestas cubran el total de la pantalla dejando en un segundo plano el deporte en sí.
Recuerdo que hubo una época, no tan lejana, que muchos dejaban su trabajo o arriesgaban el poco dinero que poseían para dedicarse a las apuestas de caballos de carreras. Los locales en donde funcionaban las bancas de apuestas siempre mostraban un lleno total.
Ni hablar de los que recibían apuesta de manera ambulante. Eran más esperados que cualquier persona que podamos darle alguna importancia de algún evento trascendental que nos pueda pasar en la vida.
Los juegos de azar han acabado de manera fulminantes con relaciones de parejas, negocios y hasta vidas. Es cierto que nadie le pone de manera directa una pistola en la cien a otro para que apueste, pero el gusanito del azar es algo serio.
Se crea la ilusión de poder ganar, de poder salir de manera fácil y rápida de alguna situación económica apremiante. Esto es algo que quizás pueda ocurrirles a pocas personas en pocos momentos.
Pero basta con ganar un par de veces para seguir en el juego y perder cien.
Por lo general, el buen apostador se retira cuando no está seguro, no arriesga ni deja todo al destino. Si no está seguro, simplemente no participa. Es en este punto donde entra en juego la lógica de las probabilidades.
Pero lo que llega fácil no cuesta y es allí donde aparece la avaricia y hace que lo ganado se valla a la misma velocidad con la que se logró obtener.
Captura de pantalla de la aplicación de la página de apuestas a la que estoy suscrito
¿Entonces no apuestas? Sí, claro que lo hago. Solo que conmigo las casas de apuestas salen en quiebra, no porque gane mucho sino porque apuesto muy poco.
Ejemplo:
Los fines de semana apuestos en algunos juegos de futbol de los torneos locales que me gusta ver, pero solo apuesto un máximo de 1.1 STEEM. Esto, si gano, me da una ganancia de 1.5 Steem. Como verán no es algo que haga para enriquecerme, lo hago más por ponerle picante al juego.
Cuando empezó la temporada actual del futbol en Europa coloque 7 STEEM como saldo, entre ganados y perdidos tengo de capital 9 STEEM. Como leerán, no es algo que me produzca ganancias, solamente entretenimiento.
Así que, en conclusión, simplemente no estoy a favor, ni en contra, sino todo lo contrario. Eso sí, a quienes se dedican a esto solos les puedo decir que cuidado con lo que arriesgan. Así como se gana, se pierde, esto último más que lo primero.
Hasta aquí esta publicación. Espero que la misma sea del agrado de ustedes. Me gustaría extender una invitación a @emy.pets05, @josertalaverag, @adeljose, @aleisbertblanco y a @karianaporras a que participen en esta iniciativa.
Emoji creado en Bitmoji. Diagramación de mi autoría
Si quieres conocerme un poco más visita mi publicación de presentación en Steem atreves de este enlace
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Saludos @theatrorve.
Claramente la suerte no siempre es lo suyo, esta anécdota de su infancia puede parecer chistosa e irónica, pero muchos hemos tenido ese tipo de experiencias en las cuales cuando la suerte nos acompaña inmediatamente sucede algo que no nos permite disfrutar de lo obtenido. Pero en parte es mejor, ya que así no sentimos esa atracción a probar la suerte y a experimentar mayores perdidas, que no solo son a nivel económico sino a veces trascienden a perdidas en el ambito personal.
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Saludos mi coterraneo caraqueño German, leí tu publicación y te cuento que, mucho o casí todo, lo expresado por ti lo comparto de la misma manera. Cada persona tiene su propio criterio sobre lo que llaman Suerte; desde mi punto de vista esta no más que una manera de llamar a un resultado basado en un conjuto entre preparación y oportunidad y no de esperar que todo caiga del cielo como dicen.
Que existen situaciones donde quizás algo que no esperabas se haga efectivo o real, seguro detrás de eso hay algo que provocó su causa.
En referencia al azar, sobre todo en juegos, hay un dicho que debes conocer o haber escuchado que reza: "El que inventó el juego, inventó la trampa" y ahí es donde muchos caen en las garras de los más hábiles en ese termino.
Es un tema con mucha tela para cortar, pero también debo respetar el punto de vista de cada quien.
Gracias por la invitación amigo, esta es mi humilde opinión @theatrorve
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