Ha pasado el tiempo, los que eran los primos mayores, ahora son los mayores en verdad y los más viejos ya no están, se han ido a un lugar mejor. Sin duda alguna allí es que nos damos cuenta que el tiempo ha pasado. Y se ha ido bastante veloz, sin darme cuenta.
Ese tiempo no es infinito, ha pasado casi sin darme cuenta, mientras veo las fotografías del pasado.
Es así como queremos ver ese paso del tiempo, cada vez que miramos hacia atrás.

Cada vez que miramos podemos ver esa lenta velocidad en la que avanzan las canas. Las pintamos y tratamos de ocultarlas por un tiempo, hasta que decidimos dejarlas libre como el viento.
La vida sigue y nosotros intentamos llevar el ritmo a cada una de nuestros pasos. Debemos valorar el tiempo como unidad que se acaba y debemos aprovechar cada uno de sus segundos.
