Muchos los conocen como atardecer, también se le conoce como crepúsculo, otros lo nombran ocaso, anochesida, pero lo cierto del caso, es que maravillarse con este fenómeno de la naturaleza nos hace reflexionar y hasta nos invita a una catarsis inigualable.
Esta foto la tomé en mi ciudad natal, mi Coro querido, iba camino a mi casa, que queda al oeste de la ciudad, conducía solo, y no paraba de observar cómo se iba ocultando el sol en medio de cujíes y esa brisa fuerte que pega en tu cara, y lo primero que se me vino a la mente observando ese bello espectáculo fue lo siguiente:
‘’Agradece a Dios día a día, por respirar, por el agua, por la vida y sus complejidades, por tus sentidos, por la brisa que acaricia tu piel, tus sueños, por los tropiezos y cada triunfo‘’.
Saludos, gracias por leerme,
el texto y la imagen son propiedad de mi autoría @joseyari