Después del desayuno y de atender mis responsabilidades en Steemit y en mi casa. Salí con Sebastián hacia el Centro de Reuniones donde se lleva a cabo la Remodelación.

Mi nuevo albañil estuvo 3 días enfermo, así que me dijo que trabajaría el fin de semana para recuperar el tiempo perdido.

Llevé una bandeja con costillas de cerdo, para darle una sorpresa a los Kids colaboradores y todos los que estuviesen allí.

El albañil ya empezó a pegar las cerámicas del cuarto de baño así que yo me di a la tarea de organizar todo lo que va a necesitar y conversar con él sobre la forma en que iría cada pieza.

No tengo dinero para comprar tantos materiales, en Venezuela solo el juego de baño (poceta y lavamanos) tiene un valor de $150 aproximadamente. La cerámica y el pego también es costosa.

Así que para ahorrar costos, busqué cerámicas que me sobraron cuando construí mi casa y que tenía de repuesto en caso de que alguna de mi piso se dañara. (En todas las construcciones, siempre sobran algunas piezas)

Las limpié y ordené, para que el albañil dispusiera de ellas.

Nos dimos cuenta, que faltarían algunas piezas más, así que registramos el depósito de mi hermana y encontramos una caja de cerámicas cuadradas. Buscamos la manera de combinarlas en el piso y hacer una especie de collage.

_{Limpiando los recortes de diferentes piezas de cerámica o baldosa.}

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Una vez que terminamos con las cosas de la remodelación, los Kids prepararon el fuego y empezó la parrillada.

Sucede algo interesante. Yo me he dado cuenta de que los Kids "cuando tienen dinero" (pocas veces), compran comida en la calle, les dije que esa actitud les hace gastar más dinero y que se les acaba más rápido.

Les pregunté ¿por qué no hacen lo que hacen los jóvenes de su edad y hacen sopas o parrilas? y @Manuelito16 y @Rafael26 me dijeron que ellos nunca habían hecho una parrillada. Yo me quedé extrañada, pues lo habitual en Montalbán y en muchas partes del mundo es hacer "comelonas" y compartir de forma más entretenida.

Entonces les dije. -Bueno van a aprender a cocinar. Así que esta es la segunda parrillada que les permito que sean ellos quienes preparan la comida. Y siendo honesta, tienen un talento natural porque la carne y las costillas les han quedado muy buenas.

Las comidas asadas suele ser bastante fáciles de hacer, basta con colocarle sal a la carne y listo, pero también se puede complementar con orégano y ajo.

Y nunca está de más un toque de salsa barbecue.

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Después de darnos un banquete al estilo de "Los Picapiedras" nos quedamos un rato conversando y jugando.

Me fui (sola) a la terraza a ver el atardecer, me encanta pasar las tardes allí, me desconecta y es una bocanada de aire y energías puras.

Lamentablemente, por ahora no le estoy dando permiso a los Kids de subir porque no hay protección o barandas y temo que se puedan lastimar.

Llegada la noche, después que Sebastián se cansó de jugar, retornamos a casa a cenar y dormir.